En medio de la crisis que arrastra la institución de Carabineros de Chile, en el palacio de La Moneda se han materializado reuniones “ultra” reservadas para poder reconstruir los hechos ocurridos tras la muerte de Camilo Catrillanca, como también identificar planes para hacer frente a la ola de cuestionamientos.

Fue así que este jueves el ministro del Interior, Andrés Chadwick, se encontró cara a cara con el general director, Hermes Soto, en una cita desarrollada pasadas las 16:00 horas.

Soto Isla entró de forma reservada, sin comunicaciones internas para no alertar a nadie, hasta dependencias de Interior. Lo hizo a través de la puerta de Morandé 80, la misma que utilizó este lunes cuando junto a los 6 generales inspectores fueron llamados al orden por parte del propio Presidente de la República, Sebastian Piñera.

La cita- con absoluta discreción- resultó, ya que la prensa habitual de La Moneda que estaba atenta a los movimientos no se enteró, por ende Chadwick y Soto pudieron conversar sin la presión comunicacional que ha sido la tónica de los últimos días.

Sobre el tiempo de la reunión existen dos versiones que recogió Radio Bío Bío: Una habla de 20 minutos aproximadamente y en que la autoridad política y el jefe de Carabineros estuvieron a puerta cerrada, mientras que la otra indica que el encuentro se extendió por más de una hora, y al igual que la otra, estuvieron a solas.

El contenido del encuentro no ha sido revelado, ya que sólo se ha confirmado el encuentro pero no el listado de preguntas que debió responder el general Hermes Soto.

Gobierno busca establecer horas posteriores a muerte de Catrillanca

En La Moneda es un secreto a voces que Interior busca conocer el movimiento interno que hizo el mando de Carabineros una vez que se conoció la muerte del comunero, particularmente los pasos que dieron oficiales que viajaron desde Santiago a la zona y que llegaron a La Araucanía pasadas las 22:00 horas del miércoles 14 de noviembre.

Las razones de poder establecer la agenda que por ejemplo tuvo el director de Orden y Seguridad, general inspector Christian Franzani, o el jefe de Asuntos Internos, Juan Pablo Caneo, e incluso las conversaciones que desarrolló el abogado de Carabineros que viajó, son piezas del puzzle que a estas alturas son claves para el Gobierno y especialmente para Interior.

Además, en el Ejecutivo es sabido que el presidente Piñera instruyó de forma “dura”, explicó una alta fuente, conocer todos los datos e información ya que “no se puede aceptar” mentiras u ocultamiento de hechos.

Y los temores de la actual administración están dados por las preguntas que la Fiscalía busca resolver en la indagatoria por obstrucción a la justicia, luego que los excarabineros del GOPE falsearan su primera declaración.

Quienes conocen al ministro del Interior, Andrés Chadwick, explican que ha estado monitoreando cada una de las informaciones que se conocen sobre el caso, básicamente ante la preocupación de que la institución no informe todo lo que sabe sobre la causa, pero más aún, ha puesto “mano dura y tono duro” con Hermes Soto, al mismo que ya le mintieron transcurridas la primeras horas.

Otro de los puntos que les llama la atención en el Gobierno son las razones que tuvo el general Franzani, enviado a la zona para levantar información, de viajar con el abogado de la policía uniformada, si el tema puntual era “recolectar antecedentes” para informar a Soto quien a la vez debía comunicarle los datos a Chadwick.

Ese punto, junto al resto de los funcionarios que se subieron al avión de Carabineros para viajar a Temuco, también están en la mira ahora que se conoce que habría información contradictoria y declaraciones preparadas de antemano.

Llamados telefónicos

Como es natural en La Moneda, se apuran en descartar que alguna autoridad política haya tenido idea de lo que estaba pasando o pasó puertas adentro de la comisaría de Pailahueque o en Ercilla, puesto que se limitaron a creer en la información que se transmitía desde Carabineros y -obviamente- esperando los pasos que dé la Fiscalía.

Sin embargo, y a la luz de las declaraciones del presidente Sebastián Piñera en Radio Bío Bío el martes, ahora quedó claro para todos que se debe cuestionar de forma interna esa información, tal como lo hizo el propio jefe de Estado mientras estaba en Singapur.