Dos delegaciones de diputados viajaron a Israel y Palestina para tener una serie de reuniones. Se trata de 18 legisladores de distintos partidos, quienes estarán toda la semana en el extranjero, justo cuando se tramita el reajuste al salario mínimo.

El Mercurio detalló que a Palestina acudieron Jorge Brito, Maite Orsini, Gabriel Boric, Karol Cariola, Sergio Gahona, Jorge Alessandri, Jaime Bellolio, Francisco Eguiguren, Andrés Longton, Matías Walker y Marcos Ilabaca.

Hacia Israel, en tanto, viajaron Gabriel Silber, Johanna Pérez, Loreto Carvajal, Mario Desbordes, Francisco Undurraga, Sergio Bobadilla y Tomás Hirsch.

Previo al viaje, Boric explicó que es una invitación oficial de la Federación Palestina, por lo que no hay uso de recursos públicos.

Cuestionados

Los cuestionamientos hacia los parlamentarios se han vuelto comunes las últimas semanas, específicamente, por los días libres que ellos mismos gestionan.

Por ejemplo, en la previa al feriado del 15 de agosto, el Congreso decidió concentrar todo su trabajo de la semana los días lunes y martes, para así tener libres los días posteriores al feriado del 15 de agosto.

Lo anterior generó una rápida crítica, la cual -incluso- provino desde el interior: el diputado Raúl Soto pidió revisar la situación y terminar con este tipo de privilegios.

Posteriormente, se estudió la posibilidad de modificar el calendario para tener libre el día posterior a las Fiestas Patrias, lo que establecía sólo dos semanas de trabajo parlamentario durante septiembre. Lo complejo es que la siguiente es distrital, por lo que no habría trabajos legislativo en quince días.

Primero analizaron el tema en la reunión de comités, donde inicialmente sus integrantes se habían negado a dicha posibilidad. Pero luego lo discutieron en Sala a petición del diputado independiente René Saffirio, tras lo cual votaron y determinaron cambiar la semana distrital para garantizar así el normal desarrollo de todas las sesiones de Sala y de comisiones del mes.

Este viaje se da en medio de las discusión del proyecto de salario mínimo, el cual pasará a Comisión Mixta tras el rechazo de la Cámara a las modificaciones realizadas por el Senado.

Lo anterior presenta una complejidad para el Gobierno, puesto que quería que sea aprobado a la brevedad, por lo que le ha dado carácter de suma urgencia las últimas dos semanas.