El Gobierno respaldó al recién nombrado ministro de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Mauricio Rojas, quien declaró -en un libro de Roberto Ampuero- que el Museo de la Memoria es un “montaje”. Parlamentarios de oposición, actores de la cultura y familiares de víctimas de la dictadura criticaron duramente estas palabras.

El ministro secretario general de la Presidencia, Gonzalo Blumel, afirmó, en TVN, que Mauricio Rojas ya había aclarado su “cambio de opinión”, respecto del Museo de la Memoria y que el nuevo ministro de las Culturas y las Artes, nunca “ha justificado las violaciones de los Derechos Humanos“.

En la misma línea se manifestó el exministro de Cultura, Luciano Cruz-Coke, quien afirmó que Mauricio Rojas no piensa de esa forma.

Desde la oposición criticaron duramente al ministro Rojas. La presidenta de la comisión de Derechos Humanos de la Cámara, la diputada comunista Carmen Hertz, aseguró que este tipo de afirmaciones sólo buscan minimizar los horribles crímenes de la dictadura.

Rojas utilizó el concepto “montaje” en el libro “Diálogo de Conversos”, publicado hace tres años con el actual ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Ampuero, donde afirmó también que el propósito de el Museo de la Memoria es “impactar e impedir razonar al espectador”.