El exfiscal Carlos Gajardo se refirió a las afirmaciones del persecutor Manuel Guerra, sobre que su decisión de desestimar el delito de cohecho en el caso Penta estuvo basada en “falta de pruebas”.

Gajardo condenó el grave desconocimiento de Guerra sobre la carpeta investigativa, negando la afirmación de que “no existieron actos propios del cargo por parte del exsubsecretario de Minería, Pablo Wagner”.

Para el exfiscal, esos actos estaban señalados en la acusación.

El Consejo de Defensa del Estado afirmó que interpondrá un recurso de queja ante la Corte de Apelaciones de Santiago, con el que intentarán revertir la decisión del juez.

La presidenta de este consejo, María Eugenia Manaud, afirmó en El Mercurio que existe una “interpretación torcida” de la ley y que existen gran número de pruebas que acreditan el delito.

El senador Alejando Navarro se refirió a estas declaraciones de las que- según su opinión- el Ministerio Público debería dar una respuesta.

El diputado del Frente Amplio, Tomás Hirsch, afirmó lo insólito de la decisión de Guerra, que siembra la duda de que realmente existe una intención de complacer a la élite política y económica del país.

Además, advirtió que algunos parlamentarios van a tomar acciones a este respecto, concretamente contra el fiscal Nacional, Jorge Abbott, quien respaldó la decisión de Guerra.

En la entrevista el diario La Tercera, el fiscal Guerra afirmó que su decisión estuvo basada en falta de pruebas, ya que afirmó que “no fue posible acreditar ese delito”.

Además, negó las sospechas de un interés personal en la resolución ya que aseveró no va a postular ni le interesa ser fiscal nacional.

Las principales críticas a Guerra se remontan a sus declaraciones del año 2016, cuando el fiscal aseguró que la aceptación del cohecho era “intransable” para llegar a un acuerdo; afirmación que no quiso reconocer como “error”, sino sólo de “imprudente”.