Hasta la mañana de este domingo aún se mantenía la incertidumbre en torno a la conformación de las comisiones y las presidencias de la Cámara Baja y el Senado, a la espera de que todas las partes respeten el acuerdo de los distintos sectores de la centroizquierda.
Si se respeta el acuerdo de firmado por la Democracia Cristiana, Partido Socialista, Partido Por la Democracia (PPD), el Partido Comunista y el Frente Amplio, Maya Fernández debería asumir la presidencia de la Cámara Baja, con el independiente Jaime Mulet y el DC Mario Venegas como primer y segundo vicepresidente, pese a que miembros de la Falange han advertido que no respetarán el acuerdo.
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Más compleja es la situación en el Senado, donde la presidencia en el primer año probablemente será para el socialista Carlos Montes, aunque se desconoce lo que pasará en los próximos años.
El acuerdo de la centroizquierda entrega en el segundo y tercer año la presidencia del Senado al PPD, donde la idea original es que sea repartida entre Felipe Harboe y Jaime Quintana, lo que debería quedar definido la mañana de este domingo en una reunión del comité de senadores de este partido.
Pero el punto álgido lo puso el sábado en la tarde el senador Pedro Araya, quien se sumó en el último tiempo a la bancada del PPD en la Cámara Alta y exigió una de las dos presidencias que le corresponden al partido.
Araya habría sido apoyado en su postulación por el sector del “girardismo”, y en la reunión de este domingo exigiría que eso suceda, por lo que las presidencias del Senado aún no están totalmente confirmadas.
Para esta jornada se espera una reunión del comité de senadores del PPD, donde deberían quedar zanjadas las disputas internas del partido entre el “girardismo” y los sectores más moderados, liderados por Harboe.
