El director ejecutivo de la Conaf, Aarón Cavieres, aseguró que no dudaron “ni un minuto” en aceptar la llegada del avión Supertanker a Chile para combatir incendios forestales.
En enero, mientras el fuego arrasaba con parte de la zona centro sur, Cavieres respondía a los cuestionamientos surgidos por la falta de aviones de mayor capacidad para el combate de incendios forestales.
En aquella ocasión la autoridad de Conaf sostenía que los incendios “no se apagan con agua” y que los “aviones más grandes no sirven para combatir este tipo de emergencias“, debido a la geografía de Chile.
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Sin embargo, no solo llegó el Supertanker, sino que también arribaron al país el Ilyushin, el Elvis, el Antonov más dos hércules, lo que aceleró el control y extinción del fuego.
En ese sentido, y en el marco de la conmemoración del Día Nacional del Brigadista Forestal, Cavieres se refirió el caso puntual del Supertanker, asegurando que “cuando nos lo ofrecieron formalmente como donación, no dudamos ni un minuto y los tiempos fueron extremadamente rápidos. No hay ningún documento ni declaración mía que coloque en duda que pusimos esfuerzos para traer esa aeronave con la máxima celeridad”.
“Colocamos recursos tempranamente, iniciamos mesas técnicas cuando apenas comenzaron los fuegos, y preparamos y anticipamos muchos recursos. Los datos indican que colocamos todos los recursos que teníamos” agregó.
Asimismo dijo que “por supuesto siempre hay un espacio para mejorar. Nuestra respuesta al ofrecimiento de aviones respondió a los informes técnicos con los que contábamos. No obstante cuando nos fueron ofrecidos como aporte, hicimos todo lo posible para que esos aviones estuvieran cuanto antes en suelos chilenos”.
“Hay mucho que aprender de esta tragedia, pero es un aprendizaje que tenemos que tener como país, con altura de miras y perspectiva a largo plazo”, enfatizó Cavieres.
La autoridad de Conaf finalizó expresando su agradecimiento a los mártires de la corporación y a todos los brigadistas. “Sin ellos no hay posibilidad de controlar los incendios y no habría sido posible lograr esto en 20 días”, puntualizó.
Lucy Avilés
La versión de la chilena que financió la llegada del Supertanker, Lucy Avilés, contradice a Cavieres, ya que según ella el Gobierno no realizó las gestiones para traer el avión cisterna.
“El gobierno de Chile no debió gestionar ningún permiso para que el Global Súper Tanker pudiese salir de Usa!“, indicó.
Según Avilés, desde La Moneda solicitaron las certificaciones respecto al avión “e interrogaron a los benefactores acerca de la intencionalidad de la ayuda y sobre quién pagaría la bencina y el agua”.
“Las autoridades me pidieron las certificaciones respecto al avión como el cuestionario de preguntas dónde se nos preguntó cual era nuestra intencionalidad con la ayuda, quien pagaría la bencina, agua y más a lo que siempre contestamos, NOSOTROS“, afirma.
