El Consejo Fiscal Asesor debería entregar esta semana una propuesta sobre los criterios de utilización del Fondo de Estabilidad Económica y Social, el que asciende a 14 mil 630 millones de dólares.

Junto a ello, el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, solicitó -en la sesión del CFA del pasado 1 de julio- una opinión sobre las reglas de utilización para el Fondo de Reserva de Pensiones, el que totaliza 8 mil 550 millones de dólares.

El déficit fiscal proyectado para este año alcanzará el 3,2%. Frente a la caída de los ingresos de un 0,5% y al aumento del gasto entre mayo de 2015 y mayo 2016 hasta en un 6%, el balance efectivo hacia diciembre escalará hasta el -1,4%.

Frente a un eventual incremento de la deuda, Valdés calificó como “no muy práctica” la opción de conservar dichos fondos “empozados”.

Por eso, la pregunta apunta a cómo financiar la deuda que implicará el presupuesto de 2017, en particular, al ser un año de elecciones. ¿Se recurre a la deuda o se utiliza parte de los Fondos de Estabilización Económica y Social para ello?.

El académico de la Univrsidad de Chile, Guillermo Le Fort, plantea que la discusión debe ser respecto al 0,25% anual en que se pretende disminuir el déficit estructural.

Durante la crisis financiera internacional de 2009 y 2008, Chile utilizó 9 mil 227 millones del denominado FEES para hacer frente al complejo escenario económico. A pesar de ello, el interés devengado desde la creación del fondo en 2007 totaliza 2 mil 631 millones de dólares.

Esa es una de las disyuntivas que plantea el ex-superintendente de Bancos, Carlos Budnevich: qué es mejor para el país ¿aumentar su deuda y mantener sus activos o frenar dicha deuda ante la disminución de los ahorros?

Frente a ingresos fiscales “casi cero”, según reconoció Valdés, la utilización del FEES apuntaría a evitar un endeudamiento mayor de cara al próximo presupuesto. A pesar de que las calificadoras de riesgo han ratificado la nota de Chile, ésta quedaría supeditada al cumplimiento de la norma fiscal.