Tres cohetes fueron lanzados contra el complejo de la embajada de EE.UU. en Bagdad, situado dentro la llamada Zona Verde.

Tres cohetes se lanzaron contra la embajada estadounidense en Bagdad entre la noche del miércoles y la madrugada de este jueves.

Así lo informó el ejército iraquí, tras una jornada marcada por numerosos ataques contra intereses norteamericanos, atribuidos a grupos proiraníes.

Las baterías de defensa C-RAM se activaron durante la noche.

El ejército de Irak aseguró que ninguno de los tres cohetes alcanzó la sede diplomática. Pese a esto, se vieron afectados sitios cercanos a la ultraprotegida Zona Verde de Bagdad.

Por su parte, la agencia Reuters indicó que el sistema anticohetes de la embajada desvió uno de los de los cohetes.

Un segundo proyectil cayó cerca del perímetro de la zona, dijeron los funcionarios de seguridad, que solo hizo mención de dos cohetes.

Las sirenas sonaron en el complejo de la embajada dentro de la Zona Verde, que alberga edificios gubernamentales y misiones extranjeras en Bagdad, dijeron las fuentes.

La oleada de recientes ataques contra instalaciones militares y diplomáticas estadounidenses en Irak son atribuida a grupos armados proiraníes.

Las fuerzas estadounidenses fueron blanco de ataques en casi 50 ocasiones este año en el país. En los últimos días se ha producido un aumento de la frecuencia de los ataques.

Ataque a base aérea de Ain al Asad

Horas antes de los tres cohetes del jueves, se lanzó 14 proyectiles contra la base aérea militar de Ain al Asad.

El ataque dejó un saldo de tres heridos leves, anunció en Twitter el coronel Wayne Marotto, portavoz de la coalición antiterrorista.

“La base aérea de Ain Al Asad fue atacada con 14 cohetes. Cayeron en la base y en su perímetro. Se activaron los sistemas de defensa. Las informaciones preliminares dan cuenta de tres heridos leves”, escribió Marotto.

Posteriormente, la embajada estadounidense en Bagdad se vio amenazada por un dron, que fue abatido.

El martes por la noche, un ataque con drones explosivos impactó el aeropuerto internacional de Erbil. Este acoge también una base de la coalición internacional contra la organización yihadista Estado Islámico.