El partido Baas, en el poder en Siria, obtuvo junto a sus aliados una amplia mayoría en las legislativas del domingo, marcadas por una escasa participación, anunció el martes la comisión electoral.

La oposición en el exilio calificó el escrutinio de “mascarada”.

Afiliados al clan del presidente Bashar al Asad, el Baas y sus partido aliados lograron 177 escaños de los 250 de la Asamblea Nacional, indicó el director de la comisión electoral Samer Zemriq en rueda de prensa en Damasco.

La tasa de participación llegó al 33,17%, en comparación con el 57,56% de las legislativas de 2016, añadió.

Entre los ganadores en las elecciones figura el hombre de negocios Hussam Katerji, que es objeto de sanciones de la Unión Europea.

Se trataba de las terceras elecciones parlamentarias desde que estalló la guerra civil en 2011, que ha causado más de 380.000 muertos y provocó el éxodo de millones de personas.

Por primera vez, el escrutinio se celebró en antiguos bastiones rebeldes. Millones de sirios que viven en el extranjero, en su gran mayoría exiliados, no pudieron votar.