Una mujer emiratí se despertó tras haber pasado 27 años en coma inducido por un importante daño cerebral, anunció su familia este miércoles.

Munira Omar tenía 32 años cuando tuvo un accidente de tráfico en 1991, tras recoger a su hijo Omar en una escuela de la ciudad de Al Ain.

Omar sobrevivió y asistió al despertar de su madre décadas después en un hospital de Alemania, adonde había sido trasladada para recibir atención médica.

“Siempre creí que mi madre mejoraría”, declaró Omar, de 32 años en la actualidad, a la Agencia France-Presse por teléfono.

“Muchos médicos nos dijeron que no esperásemos demasiado tras un coma de 15 o 20 años, pero yo no lo hubiera aceptado”, añadió. “Todo esto está en manos de Dios y yo nunca perdí la esperanza”.

Omar dijo que viajó a Alemania para estar junto a su madre y que muy pocas veces se fue de su lado.

Se despertó en mayo de 2018, pero su familia prefirió no decir nada inmediatamente para salvaguardar su intimidad, explicó Omar.

Munira, de 60 años, está estable y ha vuelto a su casa en Emiratos Árabes Unidos. Está llevando a cabo un programa de rehabilitación, según su hijo.

The National / Emiratos Árabes Unidos
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El prolongado sueño que se interpuso entre una madre y su hijo

Otros medios como The National están publicando la increíble historia.

Es esperanzadora bajo todos los puntos de vista. Los detalles han ido fluyendo luego que la familia decidiera acabar con el silencio de una situación extrema.

Munira Abdulla se dirigía junto a su hijo Omar Webair, de tan solo 4 años, a la escuela del niño.

Irónicamente su auto se estrelló con un autobús escolar, lo que le ocasionó una lesión cerebral grave.

“Mi madre estaba sentada conmigo en el asiento trasero. Cuando vio venir el choque, me abrazó para protegerme del golpe”.

En ese entonces el pequeño Omar tuvo la suerte de quedar únicamente con moretones después de la colisión, pero el mayor golpe vendría por 27 largos años en los que su madre permanecería en coma. Ese día de accidente fue el último en que ambos conversaron.

Sin embargo, el despertar de la pesadilla está siendo aprovechado por el indestructible vínculo madre-hijo.

En las recientes declaraciones a los medios antes citados, la familia de la mujer se ha mostrado agradecida, feliz y dispuesta a tomar la nueva oportunidad de vida para Munira.

“Nunca me rendí porque siempre tuve la sensación de que un día se despertaría”, dijo su hijo Omar, ahora de 32 años.

“No había teléfonos móviles y no podíamos llamar a una ambulancia. Ella se quedó así durante horas”, recordó claramente, a pesar de su corta edad al momento del accidente.

Sipse.com
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Una vida en varios hospitales

Cuando Munira despertó de su prolongado “sueño”, fue capaz de articular algunas palabras y citar versos del corán.

Tras el accidente, fue llevada a un hospital local, pero luego de ver que no respondía a ningún tratamiento, fue llevada a Londres. Los doctores le diagnosticaron un “estado mínimo de conciencia”.

Varios años fue alimentada por sonda y también fue sometida a fisioterapia para evitar que sus músculos se deterioraran.

Omar estuvo presente, entre traslado y traslado. Asegura que sus visitas al hospital fueron un rutinario vínculo con su madre. El único entre ambos. De hecho, dice que sabe cuando ella tenía dolor o no.

“Para mí ella era como el oro; cuanto más tiempo pasaba, más valiosa se volvía”, dijo el hombre que caminaba varios kilómetros para ver a su mamá con quien permanecía varias horas al día.

“Nunca me arrepentí. Creo que, gracias a mi apoyo para ella, Dios me salvó de problemas más grandes “, aseguró.

En abril de 2017, las autoridades de su país otorgaron a la familia una subvención para un programa multidisciplinario integral en Alemania. Dos años después, comparten su historia con el mundo.

The National / Emiratos Árabes Unidos
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