Kaili sigue de momento, sin embargo, manteniendo su condición de eurodiputada puesto que esta solo le puede ser retirada por Grecia.

El pleno del Parlamento Europeo aprobó este martes la destitución como vicepresidenta de la Cámara de la socialista griega Eva Kaili, detenida en Bélgica por su presunta implicación en una trama de corrupción que implica el pago de sobornos por parte de Qatar para ganar influencia en la toma de decisiones políticas y económicas en la institución europea.

La medida fue respaldada por una amplísima mayoría de los eurodiputados en el pleno de Estrasburgo (Francia), en donde la decisión de despojar del cargo de vicepresidenta a Kaili fue aprobada con 625 votos a favor de los 628 expresados, con sólo un voto en contra y dos abstenciones.

Una vez destituida le corresponde igualmente al pleno decidir sobre quién tomará el relevo en una segunda votación cuya fecha está aún por determinar, aunque se da por hecho que será también un eurodiputado de la familia socialdemócrata para respetar el equilibrio negociado cuando se nombraron las 14 vicepresidencias.

De acuerdo con las reglas del Parlamento Europeo, la destitución de cualquiera de sus catorce vicepresidentes debe realizarse siguiendo un proceso en dos fases y que recoge el artículo 21 del reglamento de funcionamiento de la institución.

El primer paso lo han cumplido a primera hora de este martes los líderes de grupo de todos los grupos con representación en la Eurocámara al acordar “por unanimidad” en una reunión extraordinaria de la Conferencia de Presidentes solicitar a la Cámara la destitución de la vicepresidenta socialista griega.

La destitución requería después contar con el apoyo mayoritario de dos tercios de los votos expresados en la sesión plenaria. La presidenta de la Eurocámara, Roberta Metsola, ya decidió durante el fin de semana suspender con carácter inmediato todos los poderes, deberes y funciones de representación como presidenta, pero no pudo proceder a su destitución porque éste es un poder que compete en exclusiva al pleno de la Eurocámara.

Kaili, la cabeza más visible entre los imputados por este caso, ya había sido expulsada del grupo socialdemócrata este lunes y la presidenta Metsola le había retirado durante el pasado fin de semana las responsabilidades asociadas a su puesto de vicepresidenta, entre las que figuraban las relaciones con Oriente Medio.

Un juez belga decidió el domingo imputarla junto con otras 3 personas -incluido su compañero, el italiano Franceso Giorgi- por el delito de participación en organización criminal, blanqueo de capitales y corrupción.

El magistrado belga llevó a cabo el lunes un registro en el edificio de la Eurocámara en Bruselas mientras el Parlamento Europeo iniciaba su último pleno del año en su sede de Estrasburgo.

El grupo socialdemócrata debe ahora comenzar un proceso interno para seleccionar al futuro sustituto de Kaili, aunque fuentes de la formación descartan que haya intención de comenzar la búsqueda de manera inmediata y no esperan que se tome una decisión hasta principios de 2023.

Kaili sigue de momento manteniendo su condición de eurodiputada puesto que esta solo le puede ser retirada por Grecia.