El 29 de marzo de 2010, dos mujeres kamikazes detonaron sus cinturones de explosivos en dos estaciones de metro de Rusia.

Un tribunal militar ruso condenó el viernes a cadena perpetua al único organizador aún en vida de dos atentados mortales en el metro de Moscú en 2010, en los que murieron 39 personas y casi 90 resultaron heridas.

El 29 de marzo de 2010, dos mujeres kamikazes de la república rusa de Dagestán, en el Cáucaso, detonaron sus cinturones de explosivos en dos estaciones de metro frecuentadas en el centro de la capital rusa.

En los años siguientes, los servicios de seguridad rusos eliminaron a varios miembros del grupo islamista clandestino que reivindicó el atentado|. Además, formaba parte de la organización “Emirato del Cáucaso”, responsable de otros ataques.

El hombre condenado el viernes, Magomed Nurov, de 45 años, había sido detenido en 2019 en Daguestán. Es considerado como el único sobreviviente del grupo que llevó a cabo los atentados, niega su culpabilidad.

Según los investigadores, actuó como intermediario, conduciendo a los miembros del grupo terrorista y ayudándolos a esconderse de la policía.

Magomed Nurov también fue condenado a pagar 17 millones de rublos (222.000 dólares) de indemnización al metro de Moscú, según señaló la agencia rusa Tass.

Los investigadores identificaron hace 10 años a una mujer nacida en 1982. Era oriunda de Daguestán -una convulsionada república del Cáucaso ruso- como la segunda kamikaze implicada en el doble atentado.

“La terrorista que hizo explotar su cinturón de explosivos en la estación del metro Lubianka era Mariam Sharipova, nacida en 1982″, dijo un portavoz del FSB.