El gobierno francés anunció este jueves los principales lineamientos del levantamiento progresivo de la cuarentena a partir del 11 de mayo, con un retorno de los alumnos a las escuelas con el acuerdo de los padres, el uso de mascarillas posiblemente obligatorio en el transporte público y una evolución de las medidas adaptada a cada región.

El Palacio del Elíseo dio a conocer este jueves las principales pistas de cómo será la vida en Francia a partir del 11 de mayo, cuando empezará progresivamente a levantarse la cuarentena.

La Presidencia francesa dijo que el desconfinamiento no será “regionalizado” sino “adaptado a los territorios” del país y consensuado con los alcaldes.

En cuanto al regreso a clases, previsto de forma escalonada a partir del 11 de mayo, éste será “progresivo, en concertación con los electos locales y adaptado a las realidades locales”, añadió el Elíseo, en particular en función del tamaño de los municipios.

Se dará prioridad sin duda a “los más jóvenes, los que no son autónomos”, así como a los niños “con mayores dificultades”, pero en todo caso se respetará la voluntad de los padres, “sin obligación de volver a la escuela”, precisó el Elíseo.

En el transporte público de pasajeros, “probablemente será necesario imponer el uso de mascarillas”, dijo también el Elíseo.

En cuanto a los modelos, “siempre se dará prioridad a las mascarillas FFP2 y a las mascarillas quirúrgicas para el personal sanitario”. Al mismo tiempo, el gobierno dice privilegiar en esta etapa un uso generalizado de tapabocas en el resto de la población para hace respetar los gestos y distancias sociales de seguridad.

Emmanuel Macron animó asimismo a los alcaldes a comprar mascarillas a gran escala, “en una lógica de recomendación, no de obligación”.

El presidente francés anticipó que se darán a conocer más elementos sobre el desconfinamiento la semana que viene y un plan detallado, para principios de mayo.