El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, discutió este martes con los líderes de Francia, el Reino Unido y Alemania sobre la ola de migrantes y la situación en la región siria de Idlib, último enclave de los rebeldes en el país.

La conversación se realizó por videoconferencia y en ella participaron, además de Erdogan, el presidente francés, Emmanuel Macron; la canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro británico, Boris Johnson.

El mes pasado, Turquía decidió reabrir su frontera a los refugiados que deseen llegar a Europa, una decisión que avivó las tensiones con Bruselas y con la vecina Grecia y que llevó a los migrantes a acabar apiñándose en la frontera entre Grecia y Turquía.

“La asistencia humanitaria en Idlib y el tema de los refugiados” f
ueron tratados durante la videoconferencia a cuatro bandas, indicó la presidencia turca, además de otras cuestiones como la crisis en Libia.

Erdogan decidió abrir su fronteras a los migrantes después de que más de 50 soldados turcos fueran abatidos por el ejército sirio en la región de Idlib (noroeste) en febrero.

Turquía, que alberga a cuatro millones de refugiados -la mayoría, sirios-, reclama más ayudas por parte de la Unión Europea, ante el temor de una llegada masiva de refugiados procedentes de Idlib, donde el gobierno sirio, con el apoyo de la fuerza aérea rusa, lanzó una ofensiva para reconquistar el territorio.

Ankara desea avanzar de cara un acuerdo con Bruselas en materia migratoria antes de la próxima cumbre de líderes de la UE, prevista para el próximo 26 de marzo.

La reunión de este martes tuvo lugar por videoconferencia, y no en Estambul -como estaba programado-, a causa de la pandemia de COVID-19.

Los cuatro mandatarios también discutieron sobre “una acción conjunta contra el coronavirus”, según un tuit del ministro turco de Relaciones Exteriores, Mevlut Cavusoglu.

De momento, en Turquía hay 47 casos confirmados de coronavirus y no se anunció ninguna muerte relacionada con la pandemia.