Un neonazi alemán confesó el asesinato de un responsable político favorable a los inmigrantes miembro del partido de la canciller Angela Merkel, anunció este miércoles el ministro del Interior, Horst Seehofer.

El sospechoso, un neonazi de 45 años que ya había sido condenado en 1993 por un ataque con explosivos contra un centro de acogida de extranjeros, declaró que había actuado solo, indicó el ministro del Interior en una reunión del parlamento alemán celebrada a puertas cerradas.

Stephan Ernst
fue detenido a mediados de junio tras el asesinato de Walter Lübcke, un representante local de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Hesse. El neonazi estaba fuera de los radares de los servicios de inteligencia desde hace varios años.

El ministro aseguró que la investigación sobre este “asesinato político” continúa y busca posibles cómplices.

También prometió medios adicionales para luchar contra la derecha radical.

Lübcke, alto funcionario territorial de 65 años, fue hallado muerto el 2 de junio en la terraza de su casa en Wolfhagen, en las afueras de Kassel (oeste).

Se dio a conocer por defender la decisión de la canciller alemana de abrir las puertas del país en 2015 a cientos de miles de solicitantes de asilo.

El anuncio de su asesinato fue celebrado en comentarios de odio en las redes sociales en Alemania, pero firmemente condenado por todos los partidos.