Casi cuatro años después de los atentados yihadistas de enero de 2015 en París, los jueces de instrucción antiterroristas franceses han concluido su investigación, lo que abre la vía para un juicio en 2020, informaron este martes fuentes judiciales.

Los ataques contra el semanario satírico Charlie Hebdo, una agente de policía en Montrouge, cerca de París, y un supermercado de comida kosher causaron 17 muertos, y abrieron la vía a una oleada de atentados sin precedentes que han causado hasta la fecha 246 muertos en Francia.

Los magistrados antiterroristas notificaron el lunes a todas las partes el fin de la instrucción, según las fuentes judiciales.

Quince personas, de las cuales once en detención provisional según esta fuente, han sido inculpadas durante las pesquisas. Todas ellas niegan haber tenido conocimiento del proyecto terrorista.

La fiscalía de París debe preparar de aquí a un mes sus argumentos de cara al eventual enjuiciamiento de esos acusados.

Tres sospechosos, entre ellos uno de los posibles organizadores y la compañera de una de las asaltantes, son objeto de órdenes de búsqueda y captura.

El 7 de enero de 2015, los hermanos Chérif y Said Kouachi, islamistas radicales, mataron a 12 personas en el ataque contra el diario satírico Charlie Hebdo, antes de ser abatidos, dos días después, por un grupo de élite de la gendarmería francesa.

Al día siguiente, Amédy Coulibaly mató a una policía municipal en Montrouge, al sur de París. El 9 de enero mató a cuatro hombres, todos ellos judíos, en una toma de rehenes en un supermercado de comida kasher en el este de la capital, para acabar muerto durante el asalto policial, poco después de los hermanos Kouachi.

Las investigaciones demostraron rápidamente una conexión entre los tres hombres, a partir de una red de captación de militantes islamistas que operaba en París, y que en principio había sido desmantelada en 2005.

Si se confirma el calendario de las autoridades judiciales, el juicio podría durar unos tres meses, y se celebraría en 2020.