Las autoridades policiales de los Estados Unidos informaron de que Robert E. Crimo, presunto autor confeso del tiroteo en Highland Park, a las afueras de Chicago, durante el desfile por el Día de la Independencia que dejó siete muertos, planificó otro ataque en la ciudad de Madison, estado de Wisconsin, cuando huía de la escena del crimen.

Robert Crimo, detenido por el tiroteo mortal del pasado 4 de julio en la localidad estadounidense de Highland Park, en la periferia de Chicago, confesó ser el autor del crimen y la Policía señaló este miércoles que contemplaba “seriamente” un segundo ataque.

El fiscal del condado de Lake (Illinois), Eric Rinehart, indicó ante la prensa que Crimo, de 21 años, “admitió lo que hizo” durante su interrogatorio.

El joven se enfrenta a siete cargos de asesinato en primer grado, uno por cada víctima mortal, lo que en el estado de Illinois le puede suponer la cadena perpetua sin posibilidad de acceder a la libertad condicional.

Durante su comparecencia, reportó la prensa estadounidense, el acusado no mostró ningún tipo de emoción cuando se describió lo ocurrido ni cuando se recitaron los nombres de los fallecidos.

Según la emisora WBBM, apenas diez minutos después del inicio del desfile se escucharon hasta 20 detonaciones de arma de fuego, aunque más tarde las autoridades elevaron a 70 las rondas disparadas contra la multitud. Al llegar, los agentes confirmaron múltiples víctimas en un lugar que, según un testigo, “parecía una zona de guerra”.

En total hubo una treintena de heridos.

Según los fiscales, el acusado reconoció también haberse vestido de mujer y haberse maquillado para cubrir los tatuajes que tiene en la cara, y así mezclarse más fácilmente entre la multitud del evento.

El subdirector del Departamento del Sheriff del condado de Lake, Christopher Covelli, precisó que Crimo pretendía usar el arma que tenía en el vehículo con el que huyó para cometer un segundo ataque, esta vez en la zona de Madison, capital del estado de Wisconsin, a unos cien kilómetros.

Para entonces, todavía le quedaban unas 60 balas.

La Policía no tiene constancia de que después del primer ataque fuera a Madison de forma intencional y cree que se encontraba por la zona tras haber huido del lugar de los hechos y que contempló atacar de nuevo al ver allí una nueva celebración por el Día de la Independencia.

La investigación sigue abierta y por el momento las autoridades no se han pronunciado sobre sus motivaciones, pero está previsto que se presenten nuevos cargos contra él por tentativa de asesinato.

Según se adelantó el martes, Crimo tuvo dos encuentros previos con la Policía de Highland Park: un intento de suicidio en abril de 2019 y un incidente en noviembre de ese mismo año en el que un familiar alertó a las autoridades de que tenía varios cuchillos y que “iba a matarlos a todos”.

El subjefe de Policía detalló también que se desconocen los motivos que impulsaron a Crimo a abrir fuego, y que no se cuenta con información para determinar si se trata de un ataque racista, por motivos religiosos u otras razones.