El presidente Donald Trump se apresta a declarar el viernes el estado de emergencia en Estados Unidos para enfrentar la pandemia de coronavirus, según varios medios estadounidenses.

“Daré una conferencia de prensa hoy a las 15:00 horas (19:00 GMT) en la Casa Blanca. Tema: ¡CoronaVirus!”, tuiteó el mandatario republicano, que hablará desde los jardines de la residencia presidencial.

Acusado de haber minimizado inicialmente la gravedad de esta crisis de salud global, Trump no ha descartado en los últimos días declarar un estado de emergencia. Según varios medios estadounidenses, debería tomar medidas el viernes.

Esta fuerte iniciativa, aplicada con mayor frecuencia para los desastres naturales, permitirá que el estado federal asigne recursos para ayudar a las autoridades locales.

Trump debería basarse en la Ley Stafford, que otorga a la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias de Estados Unidos (Fema) la potestad de ayudar a los estados y a las comunidades locales a “salvar vidas, proteger bienes, la salud y la seguridad pública, o enfrentar la amenaza de un desastre”.

Los demócratas en el Congreso le pidieron expresamente que activara este dispositivo para financiar diversas iniciativas, como las estructuras de atención temporal.

A fines de febrero, Fema disponía de más de 42.000 millones de dólares en fondos federales.

En un discurso de la Oficina Oval el miércoles, Trump anunció el cierre de 30 días de las fronteras de Estados Unidos a todos los viajeros de Europa continental, excepto para los estadounidenses.

Desde el comienzo de esta epidemia, el presidente ha dado múltiples mensajes confusos, a veces en contradicción con los de las autoridades sanitarias.

En una serie de tuits sobre el coronavirus el viernes por la mañana, arremetió contra su predecesor demócrata Barack Obama, los Centros Estadounidenses para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y la Reserva Federal de Estados Unidos (el banco emisor).

Trump también ha sido cuestionado por no ponerse en cuarentena, luego de estar en contacto con numerosos políticos que tomaron esa medida de precaución tras encuentros con personas que fueron diagnosticadas con la enfermedad.

El fin de semana pasado, Trump recibió al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, en su resort de golf en Florida, Mar-a-Lago. El secretario de prensa de Bolsonaro, presente en una cena allí, dio positivo en la prueba de coronavirus.