Son imágenes que le siguen dando la vuelta al mundo, mostrando el devastador impacto del último terremoto en Indonesia, que activó la furia del mar en Palu y Sulawesi, en la costa occidental de Célebes.
En esta última localidad, antes del terremoto, celebraban hace tan solo un mes, el milagro que el mar hacía por esta comunidad de pescadores. Un adolescente trabajador, naufragó en alta mar por 49 días, fue encontrado con vida y devuelto a casa, tras ser resctador por un barco panameño, en aguas japonesas.
Esa celebración quedó automáticamente en el olvido desde el pasado viernes, por los habitantes de esta caleta. El mar, que sostuvo a su pescador, hoy fue el villano de las comunidades que trabajan y se alimentan de este.
Un hombre, desde su terraza, grababa el avance inclemente del océano, desbordándose hacia las calles de Sulawesi, tal como lo hacía en las otras localidades, al ser golpeadas simultáneamente por este.
En el registro, difundido por la televisión malasia y por The Guardian, se observan las imágenes, desde que el mar se acerca a tierra firme. El video estaría siendo tomado desde un piso no tan alto de un edificio frente a las costas, según se observa en la perspectiva.
El habitante del inmueble, evidentemente a salvo gracias a la altura del lugar, observa con una creciente desesperación, según su narración, como la ola gigantesca va tomando velocidad y altura en cuestión de segundos.
Los gritos, alertando a sus vecinos sobre la llegada del tsunami, parecen crecer al mismo tiempo que el océano. En un momento, los llama con desesperación total a salir de la zona para salvar sus vidas.
Poco tiempo después, la misma grabación muestra autos, casas, chozas frente al mar y todo lo que estaba en tierra firme, ser arrastrado por este, que sigue su avance sin clemencia.
El hombre rompe en llanto al ver que el mar lo ha destruido todo. Su dolor es directamente proporcional a lo que ha podido registrar en video. Los más de 800 muertos dejados hasta la fecha por el terremoto y tsunami en Indonesia, confirman el registró de principio a fin.
Luego de una pausa, la persona aún no identificada por los medios de comunicación a nivel mundial, registra una zona más cercana del impacto. La gente trata de escapar como puede. Forma parte del tan increíble como triste registro que llega a todas partes del mundo, mostrando la devastación que se conjuga luego de un terremoto y las consecuencias con la salida violenta del mar.
Otro video publicado por la televisión malasia, muestra como una casa es arrastrada por el mar, cuyas aguas a esas alturas de la tragedia, están recubiertas de escombros y víctimas por su letal paso.
Hacia el fin de video, la otra persona que estaba tomando el registro, huye de la escena al ver que el agua avanza peligrosamente, pero tampoco, a la fecha, se sabe nada de su paradero.
