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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

El gobierno colombiano expulsó a 9 adultos de la comunidad ultraortodoxa judía Lev Tahor y entregó a las autoridades de EE. UU. a los 17 menores que viajaban con ellos, luego de ser localizados por Interpol. La comunidad, investigada por abuso infantil, llegó a Colombia en octubre con la intención de asentarse temporalmente. La operación se realizó en 8 días en Yarumal, Antioquia, tras una alerta de Interpol por menores en riesgo.

El gobierno colombiano expulsó este lunes a 9 adultos de la comunidad ultraortodoxa judía Lev Tahor. La acción se completó con la entrega a las autoridades de Estados Unidos de los 17 menores que viajaban con ellos. La operación concluyó 8 días después del rescate del grupo, el cual se localizó gracias a una alerta internacional de Interpol.

Migración Colombia informó en un comunicado que la medida de expulsión se aplicó solo a los 9 adultos. El grupo fue embarcado en un vuelo con destino a Nueva York, acompañado por agentes de esa entidad migratoria. Los menores fueron entregados a las autoridades estadounidenses correspondientes.

La comunidad Lev Tahor, conocida internacionalmente por su vida hermética y sus continuos desplazamientos entre países, llegó a Colombia a finales de octubre. Según las autoridades, la intención del grupo era asentarse temporalmente en el país. El grupo también ha sido objeto de varias investigaciones en otros países relacionadas con abuso y control sobre menores.

La comunidad se fundó en Jerusalén en 1988. Ingresó a Colombia en dos grupos los días 22 y 23 de octubre, procedentes de Estados Unidos y Panamá. El ingreso se realizó a través de los aeropuertos de Cartagena y Medellín, con pasaportes en regla y sin alertas migratorias vigentes en ese momento.

Alerta internacional activa los protocolos

La estadía del grupo pasó inicialmente inadvertida para las autoridades colombianas. La situación cambió el 13 de noviembre, cuando una circular amarilla de Interpol y una denuncia anónima alertaron a Migración Colombia. La advertencia indicaba que 5 de los 17 menores que viajaban con los adultos estaban reportados en riesgo por pérdida o irregularidades de custodia legal en Estados Unidos.

Frente a esta alerta, Migración Colombia activó los mecanismos de verificación. El pasado 22 de noviembre, en una operación conjunta con la Policía Nacional y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), las autoridades localizaron al grupo. Se encontraban en un hotel del municipio de Yarumal, en el departamento de Antioquia. Inmediatamente, se tomaron medidas de protección para los 17 menores.

La entidad migratoria subrayó que la presencia del grupo en Colombia se desarticuló en apenas nueve días. Esta acción impidió que el grupo intentara establecer una nueva colonia en el país, un patrón que ha ocurrido en otras naciones en el pasado. La intervención se coordinó con agencias internacionales.

Los equipos psicosociales del ICBF, entidad que vela por el bienestar de niños y adolescentes, determinaron un hecho crucial. Varios de los adultos que acompañaban a los menores no tenían custodia legal vigente en Estados Unidos, a pesar de ser sus padres o familiares directos. Esta información fue clave para las decisiones posteriores.

Historial del grupo Lev Tahor

Esa contradicción jurídica se sumó al historial internacional del grupo. En la última década, Lev Tahor ha sido expulsado o investigado en varios países por disputas de custodia y movimientos irregulares de menores. Este antecedente sustentó la alerta de Interpol y la necesidad de una intervención urgente. El objetivo fue evitar nuevos traslados no autorizados de los niños y adolescentes.

Durante una semana, los 9 adultos permanecieron en un centro migratorio de Medellín. Los menores continuaron junto a ellos, pero bajo supervisión permanente de las autoridades colombianas. Finalmente, se acordó la entrega de los menores al Child Protective Services (CPS) de Nueva York. Esta entidad es el equivalente al ICBF en Estados Unidos y es responsable de garantizar su protección integral.

El traslado de los adultos se llevó a cabo este lunes en un vuelo comercial hacia Nueva York. La operación se coordinó con las autoridades responsables del control migratorio en territorio estadounidense. Los agentes de Migración Colombia acompañaron el procedimiento.

Migración Colombia explicó los próximos pasos para los adultos expulsados. “Una vez en ese país, los adultos expulsados serán recibidos por las autoridades respectivas que evaluarán su situación judicial y verificarán si existen procesos penales o requerimientos pendientes”, indicó la entidad en su comunicado.