Las diferencias en el seno del oficialismo en Argentina se recrudecieron este martes con declaraciones de representantes del ala de la vicepresidenta del país, Cristina Fernández de Kirchner, contra el rumbo de la gestión del mandatario Alberto Fernández, quien en un acto llamó a la unidad para cumplir con el pueblo.

El secretario general de la organización kirchnerista La Cámpora, Andrés Larroque, acusó que Alberto Fernández “adulteró” el contrato electoral por el que llegaron a la Presidencia en 2019 porque planteaba la mirada que sostiene “centralmente” Cristina Fernández, y lo responsabilizó de la “derrota catastrófica” en las elecciones legislativas de noviembre pasado y de estar construyendo la próxima, en las presidenciales de 2023.

Alberto Fernández fue nombrado como candidato presidencial por Cristina Fernández de Kirchner para integrar la fórmula que ganó las elecciones para gobernar Argentina desde diciembre de 2019, pero hace dos meses que no se hablan.

“Legitimar gobernando”

Este martes, en un tuit en el que la vicepresidenta daba cuenta de un reciente encuentro con Pilar del Rio, periodista y esposa el escritor José Saramago, recordó que a ella la conoció en mayo del 2003, cuando faltaban unos días para la segunda vuelta electoral que debía enfrentar su marido, Néstor Kirchner.

En esas elecciones, Kirchner había quedado segundo en la primera vuelta y debía enfrentar en el balotaje al expresidente Carlos Menem, quien apenas le había aventajado por unos puntos y que acabó retirando su candidatura. Kirchner entonces fue nombrado presidente, aunque sin haber ganado los comicios de forma oficial.

“Nos íbamos a legitimar gobernando… porque se podía ser legítimo y legal de origen y no de gestión”, señaló Cristina Fernández en un mensaje que es visto como una referencia velada a su disconformidad con la gestión de Alberto Fernández.

Ya el pasado 13 de abril, al inaugurar la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana (EuroLat), la también expresidenta consideró que el hecho de que a alguien le pongan una banda y le den el bastón de mando no significa que le den el poder.

La respuesta del presidente

En medio de las crecientes tensiones, Alberto Fernández hizo este martes una férrea defensa de su gestión en un acto en la provincia de La Pampa en el que aseguró que tanto la economía como el empleo están creciendo pero en el que insistió con seguir trabajando por el desarrollo más igualitario de todas las zonas del país.

“Yo no soy el dueño del gobierno, nadie es dueño del gobierno, el gobierno es del pueblo. Nosotros solo representamos a ese pueblo”, remarcó el mandatario.

“Y yo estoy seguro que ese pueblo lo que quiere es esto, que trabajemos juntos, que nos integremos, que cumplamos con la palabra”, afirmó.

Fernández aseveró tener la certeza de que ha trabajado cada día cumpliendo los compromisos que prometió a la gente. “Y que quedan muchos todavía por cumplir, pero muchos los hemos cumplido”, aseguró.

Contra el FMI

El ala kirchnerista discrepa con el acuerdo que Argentina selló con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y desde hace días expresa a través de diferentes portavoces una escalada de críticas al ministro de Economía, Martín Guzmán.

Guzmán se defendió de las acusaciones diciendo que su función es dedicarse “100% a la gestión” y no inmiscuirse en “disputas de poder”, pero el hijo de la vicepresidenta y líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, lo cuestionó por no involucrarse en las disputas de poder económico.

El ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, indicó también este martes que esos “ataques” son para el presidente, no para el ministro de Economía, y dijo que la situación “es grave”.

“Nuestro” gobierno

“El Gobierno es nuestro”, dijo Larroque a la radio Urbana Play y recordó que la gente votó la fórmula “sobre la base de una intención de voto que era mayoritaria hacia Cristina”.

Larroque señaló que “no hay albertismo” e indicó que el que “fuerza la ruptura permanentemente con operaciones de desgaste sobre la figura de Cristina y sobre el sector que ella representa es Alberto” y agregó: “Él cree que está acertando. La verdad es que venimos de una derrota”.

El dirigente agregó que “los que están construyendo la derrota” electoral para las presidenciales de 2023 son Guzmán; el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y el ministro de Trabajo, Claudio Moroni y el presidente Alberto Fernández “por carácter transitivo”, al recordar decisiones que es tomaron “unilateralmente” como el acuerdo de Argentina con el FMI.

Larroque indicó que “hoy prima una perspectiva” que llevan adelante esos tres ministros, que es una política económica para un modelo “sesgadamente productivo” y “complementado con una pérdida del poder adquisitivo”, que redunda en una “ortodoxia ineficaz” porque Argentina no logra acumular reservas internacionales.