La líder de la oposición en Perú y ex candidata presidencial, Keiko Fujimori, seguirá en prisión preventiva hasta el 30 de abril de 2020, luego que la justicia rechazara levantar la medida cautelar por el caso Odebrecht.

Igualmente, la jueza Susana Castañeda Otsu determinó reducir el plazo de la medida cautelar, que había sido fijada originalmente en 36 meses. Ahora Fujimori podrá estar privada de libertada durante 18 meses, periodo que debería durar la investigación.

La primogénita del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000), también encarcelado, fue enviada por un juez a prisión preventiva el pasado 31 de octubre en el marco del escándalo de la constructora brasileña Odebrecht, que también salpica a cuatro exmandatarios peruanos.

Keiko, dos veces candidata presidencial, es investigada por la fiscalía por supuesto lavado de activos vinculado a aportes ilícitos de campaña de Odebrecht por un monto de 1,2 millones de dólares, y se encuentra recluida en una cárcel de mujeres de Chorrillos, al sur de Lima.

Cualquiera sea la decisión del tribunal, impactará en su futuro político mientras Perú debate una propuesta del presidente Martín Vizcarra de adelantar un año las elecciones para abril de 2020 a fin de superar “una crisis institucional” que causa recurrentes choques con el Congreso bajo control fujimorista.