Una comisión del Congreso peruano recomendó este viernes destituir e inhabilitar por 10 años de cargos públicos al juez de la Corte Suprema César Hinostroza, figura central de un escándalo de corrupción en el poder judicial.

Luego de una sesión de casi nueve horas, la Comisión Permanente del Congreso aprobó por la unanimidad de sus 26 miembros la destitución de Hinostroza, que deberá ser votada próximamente por el plenario.

De aprobarse la destitución, Hinostroza sería el primer magistrado apartado por el Congreso a raíz del escándalo de comprometedores audios de conversaciones telefónicas de jueces, que estalló el 8 de julio y que ya ha llevado a 12 personas a prisión.

En una de las grabaciones divulgadas por la prensa se escucha a Hinostroza preguntar si un condenado por la violación de una niña quiere que lo absuelvan o que le rebajen la condena impuesta por un tribunal. Como consecuencia, el juez está suspendido de su función desde hace más de dos meses.

En su alegato de defensa ante la comisión parlamentaria, Hinostroza declaró ser víctima de un “linchamiento político y mediático” por “presuntamente ser juez de Fuerza Popular”, el partido de Keiko Fujimori y opositor al gobierno, que domina el Congreso.

“Por eso estoy pagando todo este vía crucis”, agregó el juez en la sesión parlamentaria, que culminó este viernes en la madrugada.

Los 18 legisladores fujimoristas de la comisión votaron por destituir a Hinostroza e inhabilitarlo por 10 años de cargos públicos, pero lo exoneraron de la acusación de integrar una organización criminal.

Según las investigaciones de la fiscalía, Hinostroza era supuestamente el líder de una red de corrupción llamada “Los Cuellos Blancos del Puerto” del Callao (vecino a Lima), que integraban otros jueces, empresarios y funcionarios del órgano de control del poder judicial.

El escándalo de los audios ya provocó la renuncia del presidente de la Corte Suprema, Duberlí Rodríguez, y la destitución del ministro de Justicia, Salvador Heresi.

También penden de un hilo el fiscal general, Pedro Gonzalo Chávarry, y el presidente de la Federación Peruana de Fútbol, Edwin Oviedo, tras ser publicados audios que develaron sus estrechos lazos con el juez Hinostroza.

Este caso ha dejado en el virtual olvido al súper escándalo de las dádivas pagadas por la empresa brasileña Odebrecht, que salpica a cuatro expresidentes peruanos.