El abogado que representa a Cristina Fernández declaró este lunes que la resolución en que se procesa a la expresidente de Argentina, en la causa de los “cuadernos de las coimas”, es un “disparate jurídico”. “No hay ninguna prueba. (…) Esto no es un expediente, parece un guion de Netflix”, aseguró.

La expresidenta argentina y actual senadora Cristina Kirchner fue procesada este lunes por el juez Claudio Bonadio, que lleva la megacausa de sobornos conocida como “cuadernos de la corrupción” y quien además ordenó su prisión preventiva, así como a una treintena de exfuncionarios y empresarios. Kirchner -quien suma con este su sexto procesamiento en distintas causas- seguirá en libertad por sus fueros como senadora.

Tras considerar a la expresidenta “jefa de una asociación ilícita”, según informó el Centro de Información Judicial (CIJ), el juez federal Claudio Bonadio “pidió su desafuero” al Senado, que en diciembre pasado ya rechazó otro pedido similar del mismo magistrado.

Ante esto reaccionó este lunes el abogado Carlos Beraldi, quien representa a la exmandataria. “Leí la resolución y es un disparate jurídico. No hay ninguna prueba. Las declaraciones de los arrepentidos no valen nada. Esto no es un expediente, parece un guion de Netflix”, declaró la noche del lunes al canal C5N.

La trama de sobornos fue destapada por una serie de detallados diarios que llevó un chofer del Ministerio de Planificación y cuyas copias terminaron en manos de la justicia.

A esas anotaciones hechas en cuadernos escolares se han sumado las confesiones de una docena de implicados que se acogieron a la figura legal de “arrepentidos”, la mayor parte empresarios, pero también exfuncionarios kirchneristas.

En el marco de esta investigación, la senadora fue indagada dos veces por el juez Bonadio. En ambos casos estuvo personalmente en el juzgado, pero presentó escritos en los que rechazó las acusaciones.

Hace tres semanas, el juez llevó a cabo allanamientos en las tres viviendas de Kirchner, un departamento en Buenos Aires y dos casas en Río Gallegos y El Calafate, en la Patagonia, al sur del país.

En un video divulgado el domingo, la expresidenta mostró algunos destrozos producidos durante los tres días de allanamiento en su casa de El Calafate y responsabilizó al juez. “Fue un capítulo más de humillación y persecución”, denunció.

La expresidenta, que se considera una perseguida por la justicia, había recusado sin éxito al juez y al fiscal de la causa, Carlos Stornelli.