Miles de venezolanos se movilizan este miércoles en Caracas y otras ciudades para exigir elecciones generales, arreciando su ofensiva contra el presidente Nicolás Maduro pese al temor a estallidos de violencia, que han dejado una treintena de muertos en este mes.

Vestidos de blanco, llevando banderas venezolanas, los opositores empezaron a marchar desde varios puntos de concentración con la meta de llegar a la sede de la Defensoría del Pueblo con sede en Caracas, considerado un feudo chavista, donde hasta ahora no han podido entrar.

Quiero morir en Venezuela libre de dictadura. Llevo casi un mes protestando y voy a seguir hasta que salgamos de esto“, declaró a Agence France-Presse, Elizabeth Freites de 77 años, cubriéndose del intenso sol con un paraguas. En su cartera lleva una botella con bicarbonato para mitigar el efecto de los gases lacrimógenos.

El paso de la marcha hacia el centro de se vio impedido por contingentes policiales y militares que bloquearon desde temprano con camiones y equipos antimotines los accesos a autopistas de distintos sectores de Caracas y de otras ciudades.

Sin ceder terreno, los seguidores del chavismo marcharon por el centro de la capital y se concentran en las afueras del Palacio presidencial de Miraflores, donde esperarán a Maduro.

“Estamos movilizados por la revolución, por nuestro presidente. Llamamos a la oposición a que salgan de ese camino violento”, aseguró el joven Freddy Gutiérrez, vestido con los colores de la bandera venezolana.

Sube la presión internacional

La tensión en Venezuela sigue generando preocupación. La Organización de Estados Americanos (OEA) se reúne este miércoles para discutir una posible cita de cancilleres que traten el tema.

La canciller Delcy Rodríguez advirtió que de realizarse una reunión de cancilleres, Venezuela iniciará “el procedimiento de retiro” de la OEA.

A petición de Caracas, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) convocó una reunión extraordinaria para el 2 de mayo.

“Hay una presión muy grande de la comunidad internacional para una negociación política de la oposición con el gobierno; pero eso no sería una mesa limpia en la que va a imponer lo que se le ocurra. Elecciones generales no creo que sean posibles”, opinó el analista Carlos Raúl Hernández.

Las protestas estallaron luego de que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), acusado por los opositores de servir al chavismo, se adjudicara a fines de marzo las funciones del Parlamento, único de los poderes que controla la oposición, pero dio marcha atrás por la fuerte crítica internacional.

Con su movilización, los opositores exigen al defensor del pueblo, Tarek William Saab, que active un proceso de destitución de los magistrados o lo considerarán “cómplice” de lo que llaman un “golpe de Estado”.

Organizaciones internacionales también ponen atención en Venezuela.

Amnistía internacional pidió al gobierno “detener” la “persecución” y “detenciones arbitrarias” contra los opositores, y Reporteros Sin Fronteras declaró su preocupación ante “un control fuerte de la circulación de información por parte del gobierno de Nicolás Maduro, que no tolera las críticas”.