La calvicie es un miedo bastante común en los hombres. Si bien a la mayoría de los que les ocurre, comienzan a experimentarlo entre los 40 ó 50 años, algunos comienzan con este “drama” mucho antes.
A ésta condición se le llama alopecia, y de acuerdo al sitio de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, las causas más comunes que la provocan son la herencia y el estrés.
Sin embargo, también hay quienes logran superar el complejo que representa el hecho de perder el cabello. Tal es el caso del diputado Giorgio Jackson, quien hace un tiempo decidió cortar por lo sano y simplemente raparse.
Para el parlamentario, la calvicie era algo que ya debía asumir. “La decisión la tomé porque toda mi familia son pelados. Mi abuelo, mis tíos, entonces sabía que esto se estaba viniendo y es mejor asumirse que andar tratando de ocultarlo”, afirmó al periódico Las Últimas Noticias.
Frente al tema de la alopecia, el periódico español El País publicó un artículo en el que recopiló historias de hombres que cuentan cómo fue el proceso de asumir su calvicie.
La idea fue la de descubrir “si supuso un trauma, cómo se adaptaron y cómo reaccionó su entorno”. ¿Quieres saber qué dijeron los entrevistados? A continuación te presentamos 10 de estas historias.
1- Luis Mari, 49 años, transportista
“Desde muy joven llevaba el pelo largo simplemente por no molestarme en ir a la peluquería. En casa, no sé muy bien por qué, me decían que me quedaría calvo con pocos años. El tema me daba igual y no hacía caso. Cuando fui a la mili (servicio militar en España), la misma historia. Un brigada me dijo que tal vez me convendría tomar unas pastillas para fortalecer el pelo. Pero no hice caso. Al final me quedé calvo como pronosticaban, pero no ha supuesto ningún trauma. Estoy muy contento con mi imagen y pienso en las ventajas, como que no malgasto el tiempo peinándome”.
2- José, 42 años, administrativo
“En cuanto que vi que se me caía utilizaba el típico truco de colocarme el poco que tenía en donde clareaba mucho. Me miraba al espejo constantemente y me deprimía. Hasta que un día dije: ‘Basta’. Tomé una maquinilla y me rapé al cero. El día que salí a la calle y me vieron mis amistades fue extraño. El segundo mejor. Y el tercero como si nada. Se acabó el drama”.
3- Juanma, 49 años, encargado de mantenimiento
“Empecé a perder pelo a los 27 años y pasé de ser un heavy peludo a un calvo. Al principio sí me preocupé, por si se trataba de alguna enfermedad, pero resultó ser una cuestión genética, así que dejé de preocuparme y me lo tomé tal cual vino. Fue impactante el paso de peludo a calvo. Pero lo llevé bien. Eso sí, si alguien necesita un consejo, lo que puedo decir es que con alegría todo se lleva mucho mejor”.
4- Txentxo, 49 años, artes gráficas
“De joven llevaba el pelo largo, con rizos, muy bonito. De pronto empecé a notar entradas y me preocupé; y, más tarde, empezó la pérdida de cabello en toda regla, con zonas despobladas en la cabeza y la inminente calvicie a la vista. Intenté remedios naturales como, por ejemplo, cortarme el pelo en luna creciente porque decían que podía nacer con más fuerza. También probé algún producto de farmacia, pero nada. Al final, surgió la oportunidad de estar en la asociación de calvos de Errenteria y me tomé la calvicie como un orgullo”.
5- Félix, 64 años, jubilado
“Mira, en todos mis años de calvo, que son muchos, lo que he podido constatar es que la falta de pelo no entorpece la vida en general. Y, además, no gasto en champús”.
6- Alberto, 42 años, publicista
“Lo pasé muy mal. Comencé a perder pelo a los 26. Mi novia de entonces se burlaba del tema y me decía que iba a acabar como su padre, que era muy calvo. Probé varios remedios y estuve un par de años en tratamiento. No recuperaba pelo, pero sí frené la caída. Entonces, ocurrió algo inesperado. Mi novia y yo terminamos, a los pocos meses, conocí a una chica a la que le resultaba muy sexi estar con un calvo. Fue cuando dejé todo tipo de tratamiento”.
7- Sergio, 32 años, periodista
“Fue traumático quedarme enteramente calvo a los 25. En mi círculo de amigos y familiares, dejé de ser Óscar, para ser Mr. Proper. Me ponía de los nervios. Pero resultó que cuando empecé a hacer castings para televisión, como periodista, observé que a mí me llamaban antes que a otros compañeros. Y me salían más ofertas de trabajo para presentador de programas. Deduje que la calva me hacía diferente, reconocible. Ahora no la sustituiría por nada del mundo”.
8- Pedro, 33 años, camarero
“Bruce Willis, Ed Harris, Guardiola, Michael Jordan… No creo que nadie se fije en si están totalmente pelones, pero sí en que en sus trabajos son tipos de éxito. Teniendo este ejemplo como referente, siempre me animé mucho con mi calvicie que dejó de ser incipiente a los 29 para convertirse en total a eso de los 32”.
9- Carlos, 45 años, funcionario
“Bueno, a mí es que siempre me ha parecido que lo de ser calvo tenía un punto sexi. Mira las fotos del modelo Tyson Beckford. Bueno, no creo que esté calvo, creo que va rapado, pero el efecto es el mismo. Y a mí me sirve de inspiración”.
10- Javi, 42 años, empresario
“Al principio sientes una especie de frustración. Como si te fallara un recurso estético con el que te sentías bien a nivel de imagen. Pero, poco a poco, a medida que cumples años, dejas de darle importancia a la estética, y te centras en las emociones y valores esenciales de la vida. Ves que la alopecia no es uno de ellos y descubres que no pasa nada”.
La regla que todos los hombres con algún grado de calvicie deberían seguir
Muchos piensan que cuando peinan algunos cabellos de atrás o de los lados sobre las partes “despobladas” de su cabeza, consiguen disimular su calvicie, pero lo cierto es que no engañan a nadie.
Es entonces cuando aparece la inevitable pregunta, ¿qué es lo que puedo hacer al respecto? Una buena idea puede ser seguir el ejemplo del diputado Jackson y simplemente dejarte el pelo lo más corto posible.
Así al menos lo afirma el barbero profesional estadounidense Richard Bresson, quien trabaja en la destacada peluquería Fellow Barber.
El experto indicó al portal de noticias Business Insider, que el principal error que cometen los hombres con algún grado de calvicie es mantener largo el pelo de los lados.
Esto, porque se nota demasiado el contraste entre el cabello débil de arriba y el más tupido en los laterales. En cambio, cuando rebajas los laterales, no centras la atención arriba ni se resalta el “área del problema”.
“Es todo acerca de la creación de una ilusión, moviendo los ojos de la parte superior, a una visión general que es agradable a la vista”, expresó el estilista.
Por otro lado, el peluquero expresó que si esto no funciona simplemente afeita tu cabeza. Aunque es una decisión drástica, “más hombres deberían considerarlo”, dijo Bresson, añadiendo que este look te hace lucir más joven y seguro.
