Pam & Tommy, que debuta mañana miércoles en Star+, presenta un dilema ético al espectador: ¿es una nueva violación a la privacidad de Pamela Anderson?

Es una de las series más esperadas del verano y por fin llegará al streaming este miércoles. Hablamos de Pam & Tommy, una miniserie que cuenta la historia de la ya famosa filtración de un video íntimo de Pamela Anderson y Tommy Lee, en los años 90.

Protagonizada por Lily James (“Cenicienta”) y Sebastian Stan (“The Falcon & the Winter Soldier”), la producción se adentra en el robo de una caja de fuerte de la casa Lee por un contratista descontento (Seth Rogen), que tras ser injustamente despedido por Lee, decide vengarse y difunde el video sexual de la luna de miel del matrimonio, que se convirtió en una sensación mundial cuando llegó a la web en 1997.

BioBioChile tuvo acceso a la miniserie original de ocho episodios antes de su estreno, donde pudo ver varios capítulos en los que sin duda quienes se roban todas las miradas son Stan y James.

Desde hace un tiempo que la prensa alaba la personificación de James en la diva norteamericana. Lo que muchos fallaron en anunciar, es el gran trabajo que Stan realiza.

Lejos de Marvel, Stan logra destacar con una actuación impecable del voluble baterista de Mötley Crüe. De hecho, en los primeros episodiosel actor rumano-estadounidense es quien acapara la pantalla con su interpretación del músico apasionado e irascible.

Demás está hablar del cambio en su físico y sus muchas escenas usando sólo una tanga o ropa interior y una bata. Pero a pesar de todo su aspecto y actuación de “chico rudo”, Stan logra hacer resaltar la preocupación y amor de Tommy por Pam, al menos en un inicio.

James, por su parte, brilla en el papel y si bien no desaparece por completo en el rol, su transformación física y voz susurrada a lo Marilyn Monroe no deja otra alternativa que recordar a la estrella de Baywatch.

Lily, además, le da una personalidad y alma propia a Pamela, alejándose de la imagen de “rubia tonta” que la prensa ha creado por años con Anderson. Y, a pesar del tono de la serie, la actriz inglesa logra adentrarse en el daño psicológico y humillación que le provocó la filtración a la verdadera Pam.

Pam & Tommy, un dilema para el espectador

Más allá de eso, Stan y James logran una gran química, donde a veces las palabras no son necesaria. La pareja realmente lucen como dos fieras enamoradas que poco les importa su alrededor, hasta que llega el momento que los pone en una encrucijada.

Asimismo, el gran plus de la serie es que no todos son buenos y malos, sino que logramos conocer cada capa de ellos, pues se les dedica un tiempo importante en pantalla para cada personaje pueda desarrollar su historia, pasada y presente, lo que ayuda mucho a entender sus acciones.

Esto permitió también poder entender a Rand Gauthier (Seth Rogen), el responsable de que la filtración del video que humilló más a Anderson que a Lee, por lo demás.

Entre suma y resta, Pam & Tommy es una serie que cuenta con todos los elementos para ser atractivas, aunque su principal problema es el dilema ético que presenta al recrear uno de los momentos más terribles para la intérprete, que tampoco dio su autorización para usar su historia.

Entonces queda al criterio del espectador si la producción es o no otra violación a la privacidad de Pamela Anderson.