Rupert Grint, famoso por interpretar a Ronald “Ron” Weasley, ha confesado que trabajar en la saga de películas de Harry Potter fue “sofocante”.

En entrevista en el podcast Armchair Expert del también actor Dax Shepard, Grint afirmó que pasó por momentos difíciles hacia el final de los filmes porque estaba cansado de hacer siempre lo mismo por una década.

“Hubo un momento en que se sintió bastante sofocante porque era duro ir (a grabar), porque era lo mismo cada día por 10 años”, admitió en el podcast, según cita el portal de espectáculos Just Jared.

Agregó que “nunca terminaba, cada año volvíamos. Y era como el Día de la Marmota porque era la misma escenografía. A veces definitivamente sentía que quería hacer algo más, ver qué más había allá afuera”.

No obstante, no todo era malo. Aclaró que “fue una gran experiencia. Había una linda atmósfera familiar. Siempre era el mismo equipo con el cual crecimos, era un buen lugar en el que estar”.

Rupert también contó cuál es su mayor arrepentimiento de cuanto trabajaba en Harry Potter… y es muy insólito: se trata de su look con pelo largo.

“Sin duda, hubo algunas etapas incómodas. Mi pelo en la cuarta película (Harry Potter y el Cáliz de Fuego) es uno de mis mayores arrepentimientos. Llegaba al hombro. Creo que todos tuvieron una fase en que llevaban el cabello muy largo”, bromeó el actor.

Acota que “pasamos la pubertad frente a las cámaras. La puedes ver completa. Es muy vergonzoso”.

Daniel Radcliffe y Rupert Grint en Harry Potter y el Cáliz de Fuego