Este domingo 17 de noviembre, Netflix estrenó la tercera temporada de The Crown, una de sus series más populares y caras, centrada en la vida de la reina Isabel II.
El nuevo ciclo trae un recambio de rostros, donde Claire Foy deja el papel Isabel II y lo asume Olivia Colman. Por su parte, Tobias Menzies asume como el príncipe Felipe y Helena Bonham Carter como la princesa Margarita.
Pero no sólo ellos renuevan el elenco, ya que en esta temporada los hijos mayores de la monarca, ya son adultos y tienen sus propias vidas.
Uno de los capítulos más llamativos del nuevo ciclo, se centra precisamente en el cuadrado amoroso que vive el príncipe Carlos (Josh O’Connor), su hermana la princesa Ana (Erin Doherty), el teniente Andrew Parker Bowles y Camila Shand (Emerald Fennell), actualmente conocida como Camilla Parker Bowles.
En la serie se narra cómo el príncipe Carlos se enamora perdidamente de Camilla, quien estaba en una poco sana relación con Andrew. Según se ve en el capítulo, la pareja terminaba y retomaba su relación, que se basaba en celos y reconciliaciones.
En medio de uno de esos quiebres, Andrew conoce a Ana, la segunda hija de la reina Isabel, con un carácter fuerte, bajo perfil, humor negro y empoderada.
Ambos inician un romance fugaz, que termina cuando la princesa se da cuenta de la tóxica relación entre Andrew y Camilla.
Carlos, por su parte, permanece muy enamorado de Camilla e incluso piensa en pedirle matrimonio, pero es su tío Lord Luis Mountbatten y su abuela, la reina madre Isabel Bowes-Lyon, quienes toman cartas en el asunto.
Según la Reina Madre y Lord Mountbatten, Camilla no cumple con los requisitos para convertirse en esposa de Carlos y futura reina de Inglaterra, por lo que ponen en aviso a la reina Isabel y al príncipe Felipe.
Todos llaman a una reunión a la princesa Ana, quien les confirma ella que había tenido un romance con Andrew sólo por diversión, pero que había acabado por culpa de Camilla.
Cuando le cuentan de las intenciones de matrimonio de su hermano, ella responde con una frase que marcó la vida del real príncipe Carlos: “Está bien. Mientras esté preparado para ser tres en el matrimonio”.
De esta forma, la Reina Madre se encarga de mover los hilos para que Camilla y Andrew, un mujeriego empedernido, contraigan matrimonio finalmente, lo que rompe el corazón de Carlos.
La trama es muy parecida a la historia real, con excepción de que Andrew terminó con Ana debido a que se dio cuenta que la familia real jamás le daría su bendición puesto que él era católico y ellos protestantes.
Finalmente, el militar se casó con Camilla y tuvo dos hijos con ella, pero terminaron separándose en 1995 debido a las constantes infidelidades de ambos.
Camilla, en tanto, se convirtió en amante del príncipe Carlos mientras este estaba casado con la princesa Diana.
