La pandemia y escasez de mano de obra elevan los bajos salarios en Estados Unidos hasta alcanzar, en grandes empresas, los 15 dólares por hora, salario mínimo reclamado desde hace tiempo por los demócratas.

Los economistas dicen que hasta ahora el incremento no alimenta un riesgo de inflación. Las cifras de julio parecen darles la razón con un alza de precios que se desaceleró 0,5% respecto a junio (0,9%) y se mantuvo estable en un año.

“Por primera vez desde el fin de la década de 1990, los empleados con bajos salarios disponen de un poco de ventaja para exigir mejores remuneraciones económicas”, explica David Cooper, economista en el Instituto de Política Económica (EPI en inglés), un centro de análisis estadounidense.

Pese al alto número de ofertas disponibles, millones de estadounidenses están en paro. Muchos ya no quieren trabajar por un salario miserable.

Una de las consecuencias es que sectores como la alimentación tienen que limitar sus horarios de apertura pese al regreso masivo de clientes.

Para atraer candidatos, cada vez más empleadores ofrecen aumentos de salarios y prestaciones sociales.

Las farmacias CVS se unieron la semana pasada a la lista de grandes empresas -Amazon, Target, Chipotle, etc.- que decidieron pagar 15 dólares por hora. Aunque sus trabajadores deberán esperar hasta julio de 2022 para que sea efectivo.

El gigante de la distribución Walmart anunció a finales de julio que pagaría la totalidad de los gastos escolares de algunos de sus trabajadores estadounidenses, en el más reciente esfuerzo del mayor empleador privado del país por atraer o retener asalariados frente a un competidor, Costco, que paga mejor.

“No hay otra opción que pagar”

“Las empresas no tienen otra opción que pagar”, estima Rubeela Farooqi, economista en jefe en High Frequency Economics

“Los que los demócratas no han podido lograr (imponer un salario mínimo de 15 dólares) lo están haciendo las empresas por causa de la pandemia”, dijo.

En Estados Unidos el salario mínimo federal es de 7,25 dólares, un nivel que no ha cambiado en 12 años, aunque varios estados imponen uno más elevado.

Desde su llegada al poder en enero el presidente Joe Biden trató de modificar la legislación vigente, pero una fuerte oposición en el Senado lo obligó a renunciar a la propuesta.

Lo que sí firmó en abril fue un decreto que aumenta el salario mínimo de los trabajadores contratados por el gobierno federal a 15 dólares desde principios de 2022, contra 10,95 actualmente.

La competencia entre empresas hace que por primera vez el salario promedio de empleados de supermercados y restaurantes rebase los 15 dólares la hora, según el Washington Post.

“Cerca de 80% de los trabajadores estadounidenses ganan ahora al menos 15 dólares por hora contra 60% en 2014″, señala el diario.

Y el alza salarial debería seguir el año que viene.

Los empleadores prevén aumentos promedios de 3% en 2022, según una investigación del gabinete Willis Towers Watson realizada entre abril y junio, contra +2,7% este año.

“Reajuste puntual”

Pero los expertos no creen que la tendencia se prolongue obligatoriamente más allá de la pandemia.

“Las estructuras de la economía estadounidense, que frenaron el crecimiento de los salarios (…) durante décadas, no han cambiado”, indica Cooper.

“Es un reajuste puntual de los salarios más débiles que va a conducir a un aumento del consumo”, nota por su parte Gregory Daco, economista en jefe de Oxford Economics, para quien no se trata de un fenómeno “excesivamente restrictivo para las empresas que pueden descargar el alza de precios sobre el consumidor”.

Farooqi augura un final al crecimiento de los salarios debido al alto número de trabajadores desempleados en el mercado.

“No es probable que los salarios sigan aumentando si las empresas pueden encontrar trabajadores fácilmente”, opina.

El salario horario promedio aumentó de 0,4% en julio comparado con el mes anterior, y de 4,7% en un año, según cifras oficiales.