Esta tensión, ya sea física o emocional, puede desencadenar una serie de complejas enfermedades dermatológicas. Sumado al estrés, existen hábitos que pueden potenciar aún más la aparición de estas patologías cutáneas.

La piel es el órgano más extenso del organismo y puede mostrar sus anomalías a simple vista. Por ello, los problemas cutáneos por estrés suelen ser algo bastante común.

A diferencia de otros órganos y sistemas, el tejido epitelial (piel) es fácil de analizar. Podemos examinarlo sin el uso de ningún aparato y detectar los cambios que se producen en él de manera sencilla.

En este sentido, la Dra. Emilia Zegpi, dermatóloga de Grupo Cetep, mencionó que “el estrés, la fatiga, la contaminación ambiental y otros factores externos como la radiación Ultravioleta (UV), el consumo de tabaco y mala alimentación tienen un impacto negativo en la piel, ya que afecta su integridad y la función de barrera frente a las agresiones del medioambiente”.

Por otro lado, “se incrementa la pérdida de agua transepidérmica hasta en un 30%, la que se manifiesta por una piel seca y deshidratada con tendencia a las arrugas” agregó.

Además, la secreción de cortisol por el estrés crónico puede debilitar el sistema inmune, aumentar la producción de radicales libres y dañar el ADN a nivel celular, factores involucrados en una serie de trastornos cutáneos tales.

estrés
Grupo Cetep

¿Cuáles son los efectos del estrés en la piel?

Es probable que hayas notado que cuando padeces estrés, tu aspecto físico se deteriora. Y no se trata solo de que tengas ojeras cuando duermes mal, sino que el acné puede aparecer con mayor facilidad o las heridas cicatrizan más despacio, entre otros efectos.

Lo anterior ocurre debido a que todos estos signos responden a mecanismos químicos regulados por hormonas en sangre que, a su vez, están respondiendo a un estado de alerta psicológica.

La Dra. Zegpi explica que dentro de los efectos que provoca el estrés en la piel están “la falta de luminosidad y tono apagado de la piel, obstrucción de los poros, deshidratación, rojeces y molestos picores cuando se exponen a fuertes cambios emocionales o de temperatura y, en muchas ocasiones, granos y brotes de acné”.

5 enfermedades que provoca el estrés en la piel

Dentro de las enfermedades dermatológicas provocadas por el estrés destaca el acné, que comúnmente se presenta en la cara, cuello, hombros, pecho y espalda alta. Si no se trata, puede dejar cicatrices u oscurecer la piel.

También, es común que las personas presenten rosácea, una patología crónica de la piel que tiene ciclos de desvanecimiento y recaída. Los síntomas frecuentes incluyen rubor facial, protuberancias elevadas y enrojecidas, enrojecimiento facial y sequedad de la piel.

Por otra parte, está la dermatitis, que se caracteriza por sus manchas escamosas, amarillas o blancas que se descascaran. Las áreas afectadas pueden ser rojizas, con picazón, aceitosas o grasosas. En el área con la erupción puede ocurrir pérdida de cabello.

Una que se mencionó anteriormente es la psoriasis, la cual provoca parches escamosos, blanquecinos y bien definidos en la piel. Es usual que aparezcan en el cuero cabelludo, los codos, las rodillas y la espalda baja. Puede ocasionar picazón o ser asintomática.

Por último, está la alopecia nerviosa, una enfermedad por la que se pierde cabello de la cabeza debido a altos índices de estrés, que promueven su caída y en la mayoría de los casos suele ser temporal.

Además de los factores mencionados anteriormente, la doctora Emilia Zegpi aclara que “hay factores nutricionales como dietas altas en carbohidratos y grasas; dietas deficitarias en vitaminas y minerales; consumo de tabaco y alcohol que contribuyen a potenciar procesos oxidativos a nivel celular que inciden en cuadros cutáneos que se asocian a estos trastornos”.

Recomendaciones para combatir el estrés:

– Mantén una dieta rica en vegetales y frutas
– Haz ejercicio regularmente
– Evita fumar
– No ingieras alcohol en exceso
– Duerme las horas suficientes para un descanso reparador
– Evitar el estrés propiciando actividades que lleven al relajo y distensión

En caso de que no se pueda combatir el estrés o si existen dudas respecto al cuidado y deterioro de la piel, es fundamental consultar con un especialista para instaurar un tratamiento adecuado y a tiempo, según sea el caso.

En Grupo Cetep cuentan con un equipo de dermatólogos y profesionales de salud mental que desarrollan tratamientos adecuados a las necesidades del paciente.