La música tiene una intervención protagónica en este montaje familiar, especialmente, a través del sonido del violín que llega en vivo al escenario.

Por Leopoldo Pulgar Ibarra

Un recurso que se combina con lo circense y teatral, en función de una entretenida fantasía escénica a cargo de Sebastián Vila, un director con trayectoria en este género mixto.

La anécdota de esta historia informa que dos artistas italianos son los personajes convocados a enfrentar y resolver el insomnio que agobia a una marquesa.

Sin embargo, la partitura chispeante y exquisita con la que se busca serenar a la aristócrata tiene una función que va más allá de lo terapéutico.

El trabajo interpretativo actoral y musical de ambos visitantes, más las melodías grabadas, conducen al público a vivir una doble experiencia.

Le ayudan a apreciar el ambiente, inspirado en el barroco, vertiente artística que influyó tanto en la música como en la expresiva ornamentación del vestuario y la escenografía de la obra.

Al mismo tiempo, aproximan al espectador a la superficie del fenómeno del insomnio, entendido como un mal sueño, y a la subsiguiente intranquilidad espiritual que sufre la mujer.

La compañía Cirkoqoshka (“Ursaris, el último Encantador de Osos”, “El Kabinete de Madame Forest”) fue fundada en 2013 por la diseñadora teatral Carolina Sandoval y el compositor musical Álvaro Pacheco, integrantes del elenco junto a Carolina Gimeno y Mario Escobar.

Il Concerto, fotografía de Patricio Melo, GAM (c)
Il Concerto, fotografía de Patricio Melo, GAM (c)

Armonía y equilibrio

Álvaro Pacheco reconoce que “Il Concerto” se inspira en “Las Variaciones Goldberg”, de Juan Sebastián Bach, que el compositor alemán compuso para terminar con el insomnio de un conde, en 1741.

En la comedia chilena, Il Maestri de Maestris y Cabeza di Pattata son los dos coloridos sanadores que, con el apoyo de la sirvienta, se esfuerzan por hacer dormir a la marquesa.

Recurren a todo lo que manejan para liberarla del desasosiego: acrobacias, pruebas de equilibrio, saltos y caídas, humor, ironías, formas inusuales de tocar el violín y mucha ingenuidad.

En este sentido, al ser el gesto y la corporalidad del payaso y sus acrobacias el soporte de la narración, su dinámica va perfilando el rasgo básico de los cuatro personajes de la obra.

Por otra parte, y aunque la música tiene la capacidad de infiltrarse, a través de las grietas del insomnio, la obra no bucea en la intimidad ni en el mundo complejo de las subjetividades de sus protagonistas.

Sí deja, en conjunto con lo circense y teatral, una sensación plácida de armonía y equilibrio como parte de una propuesta familiar que enfatiza el disfrute del juego musical y corporal.

Una comedia que genera simpatía y agrado, y que requiere más espacio para que no se restrinja el amplio despliegue que requieren las acrobacias que se realizan en el piso y en la altura.

Il Concerto

Compañía Cirkoqoshka
Hasta el 15 de septiembre.
Sábado y domingo 16.00 y 18.00 horas.
Entrada general $ 5.000; estudiantes y tercera edad $ 3.000.
Centro Cultural Gabriela Mistral (Gam)
Alameda 227, Santiago