Antofagasta es una ciudad reconocida por su bello monumento natural La Portada, que año a año atrae a turistas a este arco elaborado por la naturaleza a 18 km al norte de la ciudad. No obstante, todo lo hermoso de las rocas sedimentadas se ven eclipsadas por la contaminación que se evidencia en la comuna.

Y es que por ser una zona minera, Antofagasta ha sido gravemente contaminada con desechos tóxicos, especialmente tras la instalación de un galpón de concentrado de Zinc (TEGM) de Antofagasta Terminal Internacional (ATI).

Según estudios elaborados por el Instituto de Salud Pública (ISP), en el lugar se detectó una alta presencia de plomo alcanzando los 0,259 mg/m3, pese a que la norma es de apenas 0,05 mg/m3. El arsénico, en tanto, alcanza los 0,013 mg/m3, mientras que el tope es de 0,01 mg/m3.

En este contexto, la Cámara de Diputados aprobó un informe elaborado por la Comisión Investigadora, la que incluyó responsabilidades, propuestas y recomendaciones en la materia.

No obstante, al cierre del debate una carta enviada por Ricardo Díaz, vocero de la organización Este Polvo Te Mata, llamó particularmente la atención, representando el sentido reclamo de los vecinos de Antofagasta, que deben lidiar diariamente con la contaminación.

“Cada mañana mi auto y las ventanas de mi casa aparecían impregnadas de un polvillo negro muy brillante y viscoso que de tanto verlo se hacía invisible. El Colegio Médico demostró que este polvo tiene más de 16 metales pesados”, indica el texto leído en la sala por el diputado Giorgio Jackson.

“El Instituto de Salud Pública descubrió una cifra que era corta, pues ratificó lo dicho y evidencio que en verdad eran 19 metales pesados asociados a metales como cobre, zinc, plomo, cadmio y otros, que descubrí después están asociados al surgimiento de enfermedades nerviosas, a trastornos de aprendizaje y al tan temido cáncer”, agrega el escrito.

“Mi vida dejó de ser tranquila. De pronto nos fuimos dando cuenta que la cantidad de personas enfermas de cáncer era más de ocho veces la media nacional y nos dimos cuenta que las cifras de autismo en la región son las más altas”, se lamentó el dirigente.

“En resumidas cuentas este polvo nos está matando, pero es una muerte lenta, es una muerte hipócrita, una muerte maricona que cada día se sienta en nuestras mesas, en nuestras casas y que va cobrando víctimas sin que nada haga algo por detenerla. Los antofagastinos van muriendo poco a poco. Su calidad de vida es la peor de Chile y pareciera que todos dicen ¿y qué?”, sentencia.

“Se han encontrado trazas de metales pesados en cordones umbilicales de niños recién nacidos y todavía no se instala el tribunal ambiental prometido hace más de dos años y no nos podemos defender (…)”, reclamó.

Revisa la lectura de la misiva,, subida a Youtube por el equipo del parlamentario de Revolución Democrática