El Juzgado de Garantía de Parral condenó al médico legista Mario Peña y Lillo por falsificar la autopsia a Hernán Canales Canales de 39 años, quien falleció atropellado por Martín Larraín.

Tras la exhumación del cuerpo, la nueva autopsia que instruyó la Fiscalía permitió detectar diversas irregularidades practicadas en el informe realizado por el médico.

El peritaje original no daba cuenta de la realidad con la que se encontraba el cuerpo y se informó de procedimientos que nunca se llevaron a cabos en la víctima.

Canales murió durante la madrugada del 18 de septiembre de 2013 tras ser atropellado por Martín Larraín Hurtado, hijo del ex senador y ex timonel de RN Carlos Larraín en el sector de Curanipe, en la costa sur de la región del Maule.

Por este hecho la Fiscalía lo acusó del delito de falsificación de instrumento público, siendo condenado a una pena de 300 días de presidio menor en su grado mínimo. Además, el profesional no podrá ejercer cargos públicos mientras dure la condena.

La investigación permitió establecer además que al momento en que Peñailillo llevó a cabo la autopsia, el Servicio Médico Legal aún no tenía conocimiento de quién era el autor de la muerte, hecho que se constató recién 24 horas después cuando se logró detener a Larraín en un control policial a la salida de Cauquenes.