El ex presidente Ricardo Lagos aseguró que “se debe respetar la decisión de las víctimas” respecto a la confidencialidad de los testimonios recabados por la Comisión Nacional sobre Prisión Política y Tortura, que encabezó monseñor Sergio Valech y cuyo primer informe fue presentado en noviembre de 2004.
“No hay mañana sin ayer dije cuando anuncié al país la creación de la comisión”, recordó Lagos en una columna publicada este viernes en su blog, en la que explica que “con el objetivo de proteger a las víctimas se aseguró, en un inicio, mantener la reserva durante 30 años de los documentos y antecedentes de sus testimonios”.
“Días antes de recibir el informe tuve una audiencia con una señora. Ella me dijo: ‘Fui presa política a los 15 años y hoy, 30 años después soy joven y espero llegar a los 80 años. No quiero que mis nietos sepan, mientras yo esté viva, las reiteradas violaciones que tuve que soportar como presa política. Me humillaron, me vejaron y no quiero que ellos conozcan esa parte de mi historia mientras viva. Prefiero que se informen de lo que le pasó a su abuela, después que esté muerta’.
Tras haber leído las 35 mil confesiones de tortura y, en particular, tras la audiencia con esta mujer, decidí ampliar el rango de años que aseguraba que las declaraciones serían privadas de 30 a 50 años”, relató el ex mandatario.
Lagos defendió esta decisión asegurando que “acá no hubo pactos de silencio; de secreto; ni impunidad, sino que hubo respeto para que las víctimas se atrevieran a contar lo ocurrido”.
En esa línea, y ante la decisión del gobierno de Michelle Bachelet de analizar las solicitudes para levantar la confidencialidad del informe, Lagos llamó a que “reivindiquemos lo que fuimos capaces de afrontar como chilenos, y valoremos los aportes significativos que durante estos 25 años se han realizado para el esclarecimiento de la verdad y la justicia”.
“Es cierto, siempre se puede hacer más, pero ante todo se debe respetar la decisión de las víctimas de querer hacer pública sus historias”, insistió.