Durante la tarde de ayer lunes la Gobernación de Valparaíso y el Club Santiago Wanderers sostuvieron una reunión para comenzar a delinear cuales serán las medidas de seguridad para el desarrollo del próximo clásico porteño que se jugará el domingo.

Por su parte, el gobernador Omar Jara indicó que esta vez se comenzará una hora antes del encuentro a revisar que todas las medidas de seguridad se cumplan cabalmente, en donde se dispondrá un guardia para cada 100 personas, solo vendiéndose una entrada por persona en la sede de Wanderers, la que quedará registrada en un listado.

Everton, mediante su gerencia, llegó hasta el Tribunal de Viña del Mar para interponer una querella en contra de quienes resulten responsables de los desmanes, además de poner a disposición de la Fiscalía nuevos antecedentes fotográficos y de video para la investigación que sigue en curso, según lo señaló Carlos Oliver, gerente del club.

En tanto el prefecto subrogante de Viña del Mar, comandante Mario Ramírez, señaló que se les entregó un plazo de 20 días para investigar lo ocurrido en Sausalito, para así poder identificar a las personas que saltaron al campo de juego y poder entregar las sanciones correspondientes.

Además el club Everton informó que está a la espera de un informe detallado de los daños que presenta el estadio, el que debería ser enviado desde el municipio, agregando que los abogados del club están evaluando la posibilidad de demandar o no a la empresa de seguridad responsable del servicio aquel día.