Los fiscales de la región del Bío Bío cuentan con una sobrecarga laboral, ya a una década del inicio de la reforma procesal penal en la zona. Pese a los avances en materia legal, los profesionales deben enfrentar apretadas agendas laborales.
Lo ideal es que cada persecutor tenga 1.200 causas al año, sin embargo la cifra se dobla con 2.200 causas al año en promedio.
Esta situación, reconoció el fiscal regional Julio Contardo, significa que deben buscar mecanismos para facilitar las investigaciones.
Por ello, tienen puestas sus expectativas en el proyecto de ley que fortalece el Ministerio Público, dijo el fiscal regional.
El proyecto del Gobierno aumenta en 577 personas la planta de la Fiscalía, de los cuales 122 son para cargos de fiscales adjuntos, 203 cargos profesionales, 82 cargos técnicos y 170 cargos administrativos.
Este aumento de dotación se proyecta implementar dentro de un período de tres años, mientras que en total en el Bío Bío son 63 persecutores, incluyendo al fiscal regional y en términos ideales deberían tener 90.