Esta semana se conocerá finalmente la sentencia que dictará el tribunal osornino contra un joven acusado de femicidio frustrado y desacato a inicios de 2014, cuando él tenía 19 años, delito que finalmente fue recalificado a lesiones menos graves por los magistrados, por lo que la pena bajaría ostensiblemente.

De acuerdo a lo planteado por la Fiscal Cristina Cárcamo, las agresiones se generan en medio de la convivencia familiar, precisamente en el domicilio de Rahue que la pareja compartía, concretándose la primera agresión en enero de 2014, y por la que el Juzgado de Garantía decretó que el imputado se retirara del domicilio ante la prohibición de acerarse a la mujer.

Sin embargo, la medida sólo la respetó por algunas semanas, ya que el sujeto acudió al domicilio de la mujer atacándola con un arma blanca, agresión que finalizó luego de propinarle cuatro heridas cortantes en el cuello.

A pesar de toda la prueba de cargo, el delito acusado se sustentaba en la hipótesis que existió dolo homicida por la cantidad de lesiones y el lugar del cuerpo donde se ocasionaron, sin embargo, la víctima de 29 años optó por no presentarse al juicio sumado a que no colaboró mayormente durante la etapa investigativa.

Finalmente, dijo Cárcamo, los magistrados que integraron la sala determinaron recalificar el hecho a sólo lesiones menos graves.

La fiscal indicó que la víctima no dio ninguna razón para no colaborar, eso sí, se mantienen antecedentes de que la mujer visitaba constantemente a su agresor a la cárcel, dado que él se mantuvo en prisión preventiva durante toda la etapa investigativa, sumándose que existen posibles amenazas por parte del imputado a la mujer.

Cabe mencionar que por el delito de femicidio frustrado la fiscalía estaba solicitando una pena de 12 años de cárcel, mientras que por el de desacato cuatro más. Ahora bien, con la recalificación del primer hecho prima que soliciten la mayor pena aplicable, por lo que a la luz de los nuevos antecedentes esta no superaría los cuatro años.