El británico Sam Smith se alzó el domingo en Los Ángeles con el Grammy a Grabación del Año por Stay With Me, una canción que le ha consagrado como la nueva estrella de la industria musical.

Smith, Mejor artista nuevo y ganador además de los gramófonos a Canción el Año y Mejor álbum pop vocal, se impuso con su balada a Iggy Azalea por Fancy; Sia por Chandelier; Taylor Swift por Shake It Off y Meghan Trainor por All About that Bass.

“¡Dios mío, muchas gracias! Esta es la noche más feliz de mi vida”, aseguró el cantante, de 22 años.

Quiero dar las gracias al hombre que inspiró esta grabación, del que me enamoré el año pasado. Muchas gracias por romper mi corazón porque me diste cuatro Grammy“, declaró con su cuarto premio de la noche en las manos.

La carrera de este joven despegó hace apenas unos meses cuando publicó su primer disco “In The Lonely Hour”, el tercer disco más vendido en Estados Unidos el año pasado.

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