Movidos han estado los últimos días en la política chilena. Al conflicto entre la dirigencia del Colegio de Profesores y las bases, se sumó la falla en el Metro y los rumores de que la presidenta Michelle Bachelet pueda realizar ajustes en su gabinete ministerial.

Bajo ese escenario, Mirko Macari realizó su tradicional análisis semanal a la política local en el programa Podría ser peor.

El profesional comenzó analizando la situación en el Colegio de Profesores. Señaló que “le salió el tiro por la culata a Jaime Gajardo“, presidente del magisterio. El director de El Mostrador atribuyó el problema a “un clima general de tensión que hay entre todas las bases con todas las dirigencias, como un síntoma de época… (Lo que sucede es) el agotamiento del modelo de poder de la jerarquía”.

Para Macari, esto “llega en el peor momento para el Gobierno”, debido a que “los profesores son un actor clave para darle algún grado de cauce a una reforma (educacional) que se desborda por muchos costados“.

El periodista cree que todo esto se debe a que se empieza a imponer un modelo horizontal a la hora de tomar decisiones en las organizaciones. Los dirigentes “están estigmatizados, el plebeyo tiene una desconfianza del poder“, y las dirigencias son vistas como más cercanas al poder que a las bases, afirmó.

Consultado si podría caer Jaime Gajardo, expresó que “todos podrían caer” y que “probablemente va a emerger un colegio de profesores distinto” cuando se solucione el conflicto.

Pero no sólo a Gajardo se le ha movido el piso, según Macari. “Bárbara Figueroa (presidenta de la CUT) ha tenido que pagar los platos rotos… Ella hipotecó buena parte de su capital político cuando apoyó la propuesta de salario mínimo del Ejecutivo a cambio de una reforma laboral jugada, contradiciendo lo que había dicho la CUT en el gobierno de Piñera”.

Consultado sobre la situación en el Gobierno y la posición en que quedó tras la falla ocurrida en el Metro el pasado viernes, indicó que “creo que lo que estamos esperando es el cambio de gabinete“.

Macari cree que Bachelet y su equipo de asesores sufrieron un déjà vu. “En su primer gobierno, fue la crisis del Transantiago lo que más horadó su popularidad hasta que repuntó gracias al manejo de la crisis subprime. Ella estuvo muy cuestionada, una crisis importante de liderazgo, que terminó haciendo que fuera suplantada en el poder por los partidos”, argumentó.

Los sectores populares son los que más sufren con el transporte. Se instala la sensación de que, si bien rodó una cabeza que es importante del punto de vista político (el presidente del Metro), no lo es desde el punto de vista mediático… Para la gente el transporte se asocia inmediatamente con la figura del ministro”, añadió.

Según el periodista, “el transporte es una consecuencia de una ciudad organizada en base a las políticas neoliberales de construir donde quieras, que hace que la ciudad de santiago se expanda más allá de lo razonable… Está todo pensado desorganizadamente”.

Finalmente, se refirió al decreto del Gobierno que eliminó el embarazo como preexistencia en las isapres. “Te firmó que en el Congreso no lo hacen… El paso de Bachelet por ONU Mujeres es lo que permite esta medida“.

Escucha la columna completa realizada en el Podría ser peor, conducido por Julio César Rodríguez: