El fiscal preferente para investigar los hechos de violencia al sur de la Provincia de Arauco, trabajará con personal reforzado de las policías, cada una de las cuales persigue hipótesis distintas acerca del origen de las escaramuzas.

Luego que tres carabineros resultaron heridos a perdigones en un ataque registrado en el sector rural de Pocuno, al sur de Cañete, la fiscalía regional asignó un fiscal preferente para investigar los episodios de violencia que sacuden el sur de la provincia de Arauco.

El fiscal regional Julio Contardo eligió al fiscal Juan Yáñez para esa misión, quien ya integraba el equipo encabezado por el fiscal jefe de Talcahuano, Alvaro Hermosilla, grupo que completan el fiscal jefe de Cañete, Luis Morales y el fiscal jefe de Lebu, Danilo Ramos Silva.

A estos últimos se les sumó el fiscal adjunto de Los Ángeles, Carlos Díaz, quien dirige las pesquisas por los atentados ocurridos en las comunas de Alto Bío Bío y Quilaco.

Contardo sostuvo que la decisión se tomó luego de evaluar desde hace un tiempo la redestinación de recursos, para fortalecer el actual equipo investigativo con profesionales multidisciplinarios, que potencien el desarrollo del análisis criminal, lo que requerirá necesariamente un reforzamiento de la dotación policial de la PDI y Carabineros.

Un aspecto crucial es determinar si los ilícitos están relacionados con las reivindicaciones de tierra o con delitos cometidos por grupos dedicados al robo de madera.

Carabineros esbozó esta última hipótesis, mientras la PDI sigue la línea del conflicto étnico y hasta ahora, los datos no confluyen.

El incidente de Pocuno, al sur de Cañete, ocurrió la mañana del martes 28 de octubre recién pasado y dejó heridos a perdigones a los cabo primero Claudio Parra Castillo y Julián Caro Osorio, más el suboficial Gino Placencia.

Todos los heridos fueron derivados al Hospital Naval de Talcahuano y el último a Santiago, debido a una severa lesión en el ojo izquierdo.