Estados Unidos ofreció un plan a Irán para que pueda satisfacer sus necesidades energéticas, reveló este miércoles el presidente Barack Obama, en momentos en que se busca un acuerdo para impedir que ese país desarrolle armas nucleares.

“Les presentamos un marco que les permitiría satisfacer sus necesidades de energía en forma pacífica”, señaló Obama a la prensa.

Es la primera vez que Estados Unidos alude a alguno de los temas sobre la mesa, a pocos días de que el secretario de Estado John Kerry se reuna con su homólogo iraní en Omán, para tratar de superar las diferencias.

Un acuerdo debe permitir a Teherán proseguir un programa nuclear exclusivamente civil a cambio de un levantamiento de sanciones internacionales.

“Prefiero que no haya acuerdo, antes que un acuerdo malo”, aseguró Obama este miércoles a menos de tres semanas de que se cumpla el plazo, el 24 de noviembre, para lograr un acuerdo entre Irán y el grupo de grandes potencias llamado 5+1 (Estados Unidos, Rusia, China, Gran Bretaña, Francia y Alemania), para que ese país suspenda su programa nuclear.

Irán asegura que su programa nuclear es pacífico y sólo busca garantizar un adecuado suministro de energía para su población, pero las potencias occidentales son temerosas de que al mismo tiempo Teherán lo utilice para conseguir desarrollar armas.

Si Irán es sincero en que no busca fabricar un arma nuclear “si eso es cierto, en realidad, tienen aquí un camino para garantizárselo a la comunidad internacional”, dijo Obama.

Las dos partes parecen haber acercado sus posiciones sobre ciertos puntos de la negociación, principalmente respecto al reactor de agua pesada en Arak y un aumento del número de inspecciones en las instalaciones nucleares iraníes.

Sin embargo, sus posturas siguen alejadas sobre un tema crucial, la capacidad del país islámico de enriquecer el uranio, que sirve para alimentar las centrales nucleares pero que también podría servir para construir una bomba atómica.