Aunque no lo creas más del 80 por ciento de las personas sienten que el celular les vibra en el bolsillo, y al mirar se han percatado que esto es sólo producto de su imaginación.

Muchas veces sentimos que nuestro celular está vibrando, incluso hay personas que escuchan que su móvil suena. Ese efecto que ya no es nada de extraño fue denominado como el “síndrome del timbre” o “la vibración fantasma”.

Según consigna Think Big, esa sensación la ha experimentado el 80% de la población, y técnicamente son alucinaciones, ya que se producen sin presencia de un estímulo. Pero no hay que preocuparse ya que estas alucinaciones son prueba de que nuestro sistema neurológico y de estímulos está funcionando correctamente.

Think Big indica que esto lo explica la Teoría de la Detección de la Señal, que se especializa en entender cómo se produce la detección correcta de las señales, tanto en los sistemas como en las personas, donde las cosas que pueden son el estado de ánimo o la situación de la detección.

Javier Lorente, experto en aplicaciones e internet móvil, “nuestro cerebro, frente a un estímulo potencial, puede generar cuatro situaciones distintas, dependiendo de si se está realmente produciendo el estímulo y de si considera que se está produciendo. Así, tendremos dos decisiones correctas (no hay estímulo y decide que no lo hay. Y al revés) y dos incorrectas (hay estímulo y decide que no lo hay, y viceversa). En este análisis que se produce de forma inconsciente, el cerebro valora cuales son las consecuencias de una decisión incorrecta y elige el escenario que nos supone mayores opciones de supervivencia”.

En el caso de esta sensación el experto señala que la predisposición a pensar que se produce el estímulo, como por ejemplo, la espera ansiosa de una llamada, puede hacer que se produzca una alarma, aún cuando esto no sea real.

Según Forbes, el hecho de que a una persona le ocurra el “síndrome de la vibración fantasma” es debido a la costumbre que se ha adquirido de estar continuamente recibiendo llamadas a lo largo del día, lo que hace que la parte del cuerpo que normalmente está en contacto con el móvil perciba esa vibración fantasma.

Finalmente Lorente indica que tendemos a notar vibrar el teléfono cuando no es así, ya que el cerebro elige la alternativa que no perder llamadas.