La Contraloría General de la República cuestionó contratos a honorarios de funcionarios de la Universidad de Santiago, los cuales alcanzaban un monto superior a los 350 millones de pesos. Desde la casa de estudios aclaran que éstos se deben a pagos a investigadores, los que están plenamente acreditados.
Poco más de 350 millones de pesos en contratos a honorarios durante el 2012, fueron objetados por la Contraloría tras una auditoria de sólo un 27% de los contratos de este tipo de esa casa de estudios.
El informe del ente regulador indicó que el 55,1% de los trabajadores a honorarios de la Usach no tenía debidamente acreditadas sus jornadas laborales. Esto pues la casa de estudios carecía de un método de control de asistencia que corroborara el cumplimiento de los contratos.
El rector de la Usach, Juan Manuel Zolezzi, indicó que los casos cuestionados por la Contraloría se trata de personas contratadas para desarrollar investigaciones, las que están debidamente corroboradas en los informes que prueban el trabajo realizado.
El presidente de la Federación de Estudiantes de la Usach, Takuri Tapia, dijo que es necesario que su casa de estudios dilucide la situación lo antes posible, pero aclarando que esta situación esconde el problema de estabilidad laboral de muchos docentes.
La investigación motivó al diputado de la UDI y miembro de la comisión de Educación, Jaime Bellolio, a presentar un requerimiento a la Contraloría para que amplíe esta investigación.
Otro de los cuestionamientos de la Contraloría es sobre casos de incompatibilidades horarias de funcionarios a contrata por un determinado plazo, al que se sobrepuso otro contrato por jornadas de 44 horas semanales.
Esto creó pagos cuestionados por sobre los 800 mil pesos mensuales, que según el rector Zolezzi ya fueron devueltos por los requeridos.