Numerosos países de América Latina, en general liderados por la izquierda, condenaron la violencia de la ofensiva israelí en la Franja de Gaza y llamaron a un alto el fuego a la vez que se organizaban pequeñas movilizaciones propalestinas.
Este lunes, un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores de México reiteraba su “grave preocupación por la escalada de violencia” y reclamaba protección de la población civil afectada por los bombardeos israelíes en la Franja de Gaza.
El Gobierno “condena el uso de la fuerza y la operación militar en la Franja de Gaza” y “exige que se respeten las disposiciones del derecho internacional humanitario”, añadió el texto.
Este viernes, unas 200 personas protestaron en México en apoyo a los palestinos. Por su parte, en Venezuela, un centenar de personas, entre ellos varios diputados chavistas, marcharon hasta la representación de la Autoridad Palestina en Caracas.
“El genocidio que viene cometiendo permanentemente el gobierno israelí contra el pueblo palestino es una actitud inhumana, una actitud que no tiene excusa ni argumentación para sostenerla”, declaró a la prensa el diputado Darío Vivas, quien encabezó la marcha.
Este fin de semana, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, había denunciado “una guerra de exterminio” contra el pueblo palestino desde “hace casi un siglo”.
Este lunes, unos 50 estudiantes y militantes propalestinos protestaron delante de la embajada de Israel en El Salvador. “Palestina es un Estado libre, alto al terrorismo de Israel”, gritaron los manifestantes, entre otras consignas.
Hace algunos días, el gobierno de Chile ya había condenado “enérgicamente los ataques de Israel en la franja de Gaza”, considerando que nada justifica “acciones terroristas” ni ataques aéreos en “áreas densamente pobladas por civiles”.
En Cuba, las autoridades pidieron a la comunidad internacional que reclame a Israel “el fin de esta nueva escalada de violencia”, condenando “enérgicamente la nueva agresión de Israel contra la población de la Franja de Gaza” y su política de “castigo colectivo”.
En Uruguay, el ministerio de Relaciones Exteriores censuró la “respuesta desproporcionada” de Israel a los disparos de cohetes palestinos y llamó “a negociar urgentemente un cese al fuego”.
El mismo tono mantiene Bolivia, donde el presidente socialista Evo Morales anunció el domingo haber pedido a Naciones Unidas que demande a la Corte Internacional a La Haya abrir una investigación por “crímenes contra la humanidad”.
“No se puede entender, en este nuevo siglo, que haya intervenciones de carácter militar tan salvaje y tan inhumano, repito, es un genocidio lo que está pasando en Gaza”, se lamentó Morales.
Antes había sido Ecuador quien condenara “enérgicamente todos los actos de violencia” e hiciera un llamado urgente “a todas las partes involucradas para un cese inmediato de las hostilidades”.
Desde hace una semana, Israel bombardea la Franja de Gaza con el objetivo de parar los disparos de cohetes que lanza la organización palestina Hamas.
Hasta el momento, más e 180 palestinos han muerto en la ofensiva, la mayoría civiles, según estimó la ONU.