El seleccionador brasileño, Luiz Felipe Scolari, afirmó este sábado, tras la derrota ante Holanda (3-0), en el partido por el tercer puesto del Mundial-2014, que entregará el cargo a su federación, como estaba previsto, que será la que decidirá sobre su continuidad.
“Tiene que decidir el presidente (de la CBF). Nosotros entregaremos el cargo a la directiva de la federación, que era lo que estaba previsto, ganáramos o perdiéramos. Nuestro presidente tiene capacidad y cualidades para hacer el análisis. Teníamos que entregar el cargo a la comisión técnica, ganáramos o no el título, es lo que teníamos acordado”, señaló Scolari.
Brasil terminó en cuarta posición tras recibir diez goles en los dos últimos partidos, siete contra Alemania (7-1) en semifinales y tres frente a Holanda en el partido por el tercer lugar (3-0).
“Nosotros tenemos por contrato la entrega del cargo al final del Mundial y es lo que vamos a hacer. Voy a hablar con el presidente. El que se cae o se tropieza y no se levanta es una persona derrotada, no aquella que se levanta tras perder un partido o un campeonato. ¿Cuantos campeonatos ganamos? Ahora toca ver al presidente, hacer el análisis y después seguir mi vida”, insistió.
Scolari recordó, para defenderse, que ha estado en tres Mundiales, dos con Brasil, en que fue campeón en 2002 y semifinalista en 2014, y uno con Portugal, también entre los cuatro primeros en 2006.
“He estado en tres Mundiales, dos con Brasil y uno con Portugal y en todos ellos llegué a semifinales. No estoy en una situación en la que me tenga que estar lamentando el resto de mi vida, porque a veces en fútbol, cosas que pasan en un par de minutos pueden cambiar todo”, señaló.
“La derrota ante Alemania (en semifinales por 7-1) fue la peor de la historia de la selección brasileña, pero también hay que ver el lado positivo, que llegamos a semifinales y estuvimos entre los cuatro primeros”, añadió.
- Técnicos europeos -
El seleccionador brasileño señaló que los técnicos brasileños no tienen necesariamente que reciclarse y aprender de los entrenadores europeos.
“Cuando el año pasado ganamos la Copa de las Confederaciones se decía que eran los entrenadores europeos los que tenían que reciclarse. Sigo manteniendo que en 18 meses (que Scolari lleva en el cargo) ganamos la Copa de las Confederaciones y terminamos cuartos en el Mundial”, explicó.
“Eso no tiene nada que ver con entrenadores. Nuestro equipo tuvo algunas dificultades. Ahora tenemos una situación de un equipo que es todavía joven. Concedió siete goles en un partido, pero incluso con eso, el equipo estuvo bien, siguió luchando, creando ocasiones”, añadió.
‘Felipao’ defendió que los aficionados brasileños no deben estar preocupados por el futuro.
“No hay que tener miedo. Se puede reflexionar sobre ese 7-1, pero también pensar en un grupo que empezó a construirse de cara al Mundial de 2018, terminando cuarto”, explicó.
“Ahora siento tristeza. Comenzamos el torneo diciendo que queríamos ganar la competición. Si hubiéramos dicho que nuestro objetivo eran los cuartos de final habría sido horrible”, dijo.
Scolari trató de buscar un lado positivo a la participación de Brasil en el Mundial.
“Pienso que logramos algunos objetivos. Hubo buenos momentos en algunos partidos. Tuvimos seis malos minutos contra Alemania (en que el equipo germano anotó cuatro goles). Lamentamos ese momento, pero ocurrió”, dijo.
“En el partido por el tercer puesto no puedo criticar al equipo que perdió por 3-0. Jugó bien. Algunos dicen que hubo fuera de juego en su segundo tanto. Tuvimos buenas ocasiones y no jugamos mal. No merecimos perder por 3-0″, añadió.
“Este grupo fue muy bueno en la Copa de las Confederaciones, pero ahora no estuvo bien y los del cuerpo técnico asumimos la culpa. No jugamos tan mal hoy, la reacción del equipo fue buena, el equipo tiene calidad. El camino está abierto para hacer un mucho mejor equipo de cara al Mundial de 2018″, señaló.