Una multitud marchó este sábado en la capital argentina para pedir por la legalización del cultivo de cannabis y la despenalización del consumo al unirse a la Marcha Mundial de la Marihuana que se celebra cada mayo.

La convocatoria, según los organizadores, superó las 100.000 personas y tuvo su epicentro en la histórica Plaza de Mayo, frente a la casa de gobierno.

“Uno + que cultiva, uno – que compra”, decía una de las pancartas frente a la catedral de Buenos Aires a un lado de la plaza, cuyas escalinatas estaban colmadas de promotores de la iniciativa, varios con poleras bajo la leyenda “cultiva tu deseo”.

Este año la marcha se realiza en un clima de expectación por la entrada en vigor la semana próxima en Uruguay de una inédita ley que regula el mercado de cannabis y sus derivados.

Activistas montaron carpas en la plaza, donde distribuyeron folletos sobre los efectos medicinales del cannabis y los varios proyectos de ley sobre el tema que por ahora duermen en el Congreso.

Marchas similares se realizaron en las principales ciudades del interior del país, entre ellas Córdoba, Rosario, Mendoza, Neuquén y San Carlos de Bariloche.