Un tribunal de Catar condenó el jueves a una pareja de estadounidenses a tres años de prisión por haber provocado la muerte de su hija adoptiva de ocho años, nacida en Ghana.

Matthew y Grace Huang deberán pagar, además, una multa de 15.000 riales (4.100 dólares) cada uno, según el veredicto pronunciado por el juez del tribunal de Doha.

Este magistrado no precisó los cargos exactos por los cuales fue condenada la pareja, agregando que los dos estadounidenses serán expulsados del país cuando hayan cumplido su pena.

Los Huang tienen 15 días para apelar, según el tribunal.

El 5 de febrero, la corte rechazó la solicitud de la pareja, que había sido puesta en libertad en noviembre pasado, de abandonar Catar para reunirse con sus dos otros hijos en Estados Unidos.

Matthew Huang, un ingeniero que trabajaba desde 2012 en proyectos de infraestructura para el Mundial de fútbol de 2022, había sido arrestados después de la muerte, en enero de 2013, de su hija adoptiva Gloria, que tenía ocho años y según la familia tenía problemas de alimentación.

La pareja fue acusada por la justicia de haber matado de hambre a su hija para vender sus órganos. Sin embargo los dos norteamericanos afirmaron que eran inocentes.

El fiscal general había pedido la pena de muerte contra la pareja.

“Hemos perdido a nuestra hija [...] y este tribunal nos ha robado un año de nuestras vidas. Somos inocentes, nos sentimos como si nos hubieran secuestrado. Sólo queremos regresar a casa”, declaró Matthew Huang a los periodistas después de la audiencia.

La menor, que vivía en un orfanato de Ghana, tenía problemas de alimentación a causa de “la situación de pobreza extrema que vivió durante su infancia”, según un sitio web de partidarios de la pareja.

Los dos otros hijos de los Huang, también adoptados y de origen africano, obtuvieron en octubre la autorización de viajar a Estados Unidos en compañía de su abuela.