Amnistía Internacional acusa a Israel de haber matado a decenas de civiles palestinos en Cisjordania durante los últimos tres años, “en desprecio de la vida humana”, en un nuevo informe publicado este jueves.
El ejército israelí respondió en un comunicado reprochándole a la ONG de derechos humanos “ignorar completamente el aumento sustancial de los casos de violencia palestina”.
En su informe de 87 páginas, titulado “El gatilo fácil: el recurso a la fuerza desproporcionado de Israel en Cisjordania”, AI afirma que 45 palestinos fueron muertos y miles resultaron heridos desde enero de 2011, cuando “no parecían representar una amenaza inmediata y directa para los soldados istraelíes” desplegados en la Cisjordania ocupada.
“Las fuerzas israelíes demuestran desprecio por la vida humana, matando a decenas de civiles palestinos, incluidos niños, en Cisjordania durante los tres últimos años, con casi absoluta impunidad”, afirma la ONG con sede en Londres.
“El informe presenta pruebas que dejan en evidencia lo recurrente de incidentes mortales ilegales y lesiones injustificadas contra civiles palestinos por parte de las fuerzas israelíes en Cisjordania”, considera Philip Luther, director del programa Oriente Medio y África del Norte de AI.
La ONG reprocha también a Israel “por no haber realizado investigaciones independientes conformes a las normas internacionales”, y de esta manera favorecer “la impunidad” de sus fuerzas respecto a los palestinos.
Por lo tanto, exhorta a Israel a “abrir investigaciones independientes, imparciales, transparentes e inmediatas sobre todos los casos de civiles palestinos muertos o seriamente heridos como consecuencia de acciones de las fuerzas israelíes”.
Asimismo, insta a “Estados Unidos, la Unión Europea y al resto de la comunidad internacional para que suspendan la provisión de armas y municiones y otros equipamientos a Israel”.
En su respuesta, dada a conocer el miércoles de noche, el ejército israelí considera que “Amnistía Internacional demuestra una falta de comprensión total sobre los desafíos que debe enfrentar en Judea-Samaria (Cisjordania)”.