Exaltado por haber conseguido entrar en territorio marítimo cedido a Perú luego del fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya, se mostró el armador de la vecina nación Roberto Vieira, quien relató a RPP su “travesía” por las aguas.
Se trató de una acción cargada de simbolismo y no exenta de dificultades, que llevó a 14 tripulantes del barco pesquero Aleta Azul 1 y que, tal como narra el portal, instaló por primera vez la bandera peruana en el mar que se mantuvo en controversia.
La incursión se llevó a cabo el pasado 5 de febrero y consideró un enclavamiento aproximado de 83 millas. Según Vieira, no fue fácil llevar a cabo la maniobra, sin embargo, dijo, debían cumplir la misión que se habían autoimpuesto.
Una patrullera chilena habría notado el ingreso del navío, no obstante, informaron los pescadores, no existió contacto ni alguna clase de hostilidad.
En tanto, la bandera peruana portada durante el viaje, será entregada al Presidente de Perú, Ollanta Humala.